Los medios británicos han estado en constante especulación sobre el regreso de Kate Middleton a la vida pública después de su prolongada ausencia desde diciembre. La princesa de Gales se retiró de la esfera pública tras someterse a una operación abdominal, lo que desató una ola de rumores sobre su estado de salud y su posible retorno.
Recientemente, el Palacio de Kensington generó más expectativas al publicar una imagen retocada de Kate junto a sus hijos para celebrar el Día de la Madre, lo que solo avivó las conjeturas sobre su situación y regreso.
A pesar de la incertidumbre, el Palacio de Kensington había anunciado previamente que Middleton no retomaría su agenda pública hasta después de Semana Santa. Sin embargo, los rumores sobre su regreso no cesan y las especulaciones sobre la fecha exacta han sido tema de conversación diaria en los medios británicos.
Por ejemplo, el diario The Times sugirió recientemente que el Palacio de Kensington estaba planificando un “retorno suave” para Middleton durante Semana Santa, especulando que su reaparición pública podría ocurrir el 31 de marzo, coincidiendo con la misa matinal del Domingo de Resurrección en la capilla de San Jorge.
No obstante, estas conjeturas fueron desmentidas más tarde por el diario The Mirror, que confirmó que el retorno de la princesa de Gales estaba programado para mediados de abril, como se había anunciado originalmente.
Según Edward Coram-James, experto en relaciones públicas citado por The Mirror, el Palacio de Kensington había comunicado claramente que Middleton se tomaría un tiempo libre y que su regreso ocurriría conforme a lo planeado, sin extravagancias ni cambios bruscos en el calendario previsto.
El interés en el retorno de Middleton sigue en aumento, pero el Palacio de Kensington permanece firme en su decisión original de programar su regreso para mediados de abril.
Mientras tanto, los seguidores y los medios de comunicación esperan ansiosamente el momento oportuno para que la princesa de Gales vuelva a la vida pública de manera discreta y controlada, sin mayores sobresaltos ni conjeturas descontroladas.