La primera semana de campaña casi ha transcurrido y desafortunadamente lo que ha prevalecido hasta el momento, es la indiferencia ciudadana, cuya atención ésta puesta en dos situaciones fundamentales, la economía y la pandemia.
En este sentido, aunque los candidatos a las diputaciones federales han tratado de llamar la atención de los ciudadanos aquí en Puebla, hasta el momento la campaña no ha prendido, ni mucho menos ha comenzado a llamar la atención de la gente.
En este momento para millones de mexicanos y de poblanos, la prioridad es el tema económico, derivado de los miles de empleos perdidos en todo el país, producto de la pandemia, pero también de las malas decisiones del gobierno federal.
Por otra parte, la pandemia sigue presente en el mundo y en la vida de los mexicanos, lo cual se traduce en incertidumbre, nadie sabe exactamente cuándo podrá estar vacunada la mayor parte de la población, ni tampoco, si con esto bastará para frenar los efectos del coronavirus en nuestras vidas y en la economía.
Ante este escenario, las campañas políticas, las cuales aún no se “encienden”, son vistas con indiferencia por el resto de la población, la cual no termina por conectarse con el mensaje de las dos principales fuerzas política que chocan en este proceso, “Va por México” integrado por el PAN, el PRI y el PRD y “Juntos Haremos Historia”, conformada por Morena, el PT y el Verde.
Como lo señaló el director general del Centro de Estudios de Opinión, Manuel Martínez Benítez, hasta momento los mensajes emitidos por la coalición que encabeza Morena, como también la que protagoniza Acción Nacional, están dirigidos únicamente para fortalecer a sus respectivos “votos duros” y aún no dan una razón de voto, a los indecisos que son mayoría en este momento.
Está por demás decir, que ciertamente la campaña se encuentra apenas en su primera semana de haber iniciado y que deberá de tomar fuerza de manera paulatina y más cuando a partir del 4 de mayo, arranque también la contienda local, en donde estará en jugo el Congreso y las 217 presidencias municipales.
Lo realmente triste de esta situación, es que, si las campañas no toman fuerza y logran despertar el interés ciudadano, esto se verá reflejado en una baja participación el día de la jornada electoral.
Y es que la pandemia, sumado ahora al efecto de campañas que no despierten el interés, forman parte de un coctel, que ciertamente van a desalentar la participación ciudadana. Muy poca gente se va a animar a querer ir a votar el próximo 6 de junio.
Si de por si es difícil que la gente salga a votar en unas elecciones intermedias, lo será más en medio de la pandemia del coronavirus y más si como todo parece indicar, la tercera oleada de este mal, se da a finales del mes de abril y principios del mes de mayo.
Los expertos en estudios de medición estiman que la participación en este proceso electoral, podría llegar a un máximo del 40 por ciento y eso, si es que las campañas, despiertan finalmente interés de los ciudadanos y alientan su participación.
En este sentido es menester que el Instituto Nacional Electoral, redoble el llamado a participar en las elecciones del próximo 6 de junio y que los partidos políticos y principalmente los candidatos a las diputaciones federales, redoble el esfuerzo para hacer más atractivo el proceso ante el electorado.
Una baja participación electoral podría beneficiar al partido en el poder, Morena, el cual goza del apoyo del gobierno federal, el cual tiene en el programa de vacunación y en la operación de los programas sociales, a sus mejores promotores para mantener al menos su voto duro.
La oposición se las deberá de ingeniar para tratar de llamar la atención del voto de los indecisos, esos que en las encuestas dicen no saber si van a ir a votar o no contestan, para tratar de inclinar la balanza electoral a su favor y romper la hegemonía del partido en el poder.
En Puebla, la primera semana de campaña se ha visto eclipsada por el pleito al interior de Morena, en donde se multiplican las denuncias por la selección de candidatos, a los cuales se les acusa de no estar identificados con el proyecto del presidente López o de ser ajenos a los grupos locales del poder.
Vamos a ver si en la segunda semana de campaña, los candidatos se vuelven más audaces y presentan mejores estrategias para llamar la atención de un electorado, que, hasta el momento, se encuentra distraído y se sienten todavía ajenos tanto a la campaña, como a los candidatos.
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Ricardo Morales Sánchez
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