La Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla, confirmó que Daniela, la niña de seis años que falleció, sí era victima de violencia familiar, por lo que sus abuelos, padre y madrastra, fueron detenidos, procesados y quedaron en prisión preventiva.
La FGE señaló que la menor localizada muerta en San Isidro, al sur de la ciudad, presentaba huellas de violencia sexual y maltrato, por lo que se detuvo Marco N., José Juan N., Ana N., y Ariz Adilene N., padre, abuelo, abuela y madrastra, respectivamente, a quienes se les imputaron por lo menos siete delitos.
La Fiscalia confirmó, que cuando el padre y la abuela acudieron a reconocer a la menor a la morgue, el progenitor sugirió a los agentes no realizarle la autopsia, pues ella misma se había realizado las lesiones que presentaba, por lo que ofreció mil 20 pesos para detener las investigaciones, a su vez, la abuela ofreció su teléfono con el mismo fin.
Poco después, la madrasta y el abuelo, al momento de su entrevista para rendir declaraciones, tuvieron un enfrentamiento con los agentes, pues el hombre los retó a golpes, se ostentó como policía y además sacó un arma de descarga con la cual los amenazó.
Por su parte, la madrasta forcejeó con el agente, a quien jaloneó de un brazo para intentar inmovilizarlo, por lo que fue procesada por desobediencia y ataques peligrosos, por estos hechos quedaron en prisión preventiva oficiosa duranrte los dos meses que dure su proceso.
Por lo que respecta al abuelo, este fue vinculado a proceso por usurpación de funciones y uso indebido de uniformes o condecoraciones, portación de arma o instrumento prohibido, desobediencia y ataques peligrosos, tras el altercado con los oficiales.
El fiscal general del estado, Gilberto Higuera Bernal, dijo que no quiere adelantarse a señalar qué delitos van a imputar y contra quienes, a su vez, indicó que, “es un hecho cruel, lamentable, ocurrido en el seno familiar”, estas son “personas violentas, que no tienen consideración para su propia hija”, añadió.
Finalmente, Higuera Bernal explicó que están investigando el contexto familiar y no se descarta el consumo de sustancias ilícitas, asimismo, expresó sentirse sorprendido por unas imágenes en poder de la FGE, “nos sorprende el grado de maldad, y de crueldad que pueden tener ascendientes con una persona indefensa”.
