En marzo de 2022 la IBERO Puebla materializó un sueño: “la creación de un espacio multidisciplinar que pudiera hacer realidad el anhelo de Ignacio Ellacuría, SJ de que las universidades confiadas a la Compañía de Jesús participen de procesos históricos de liberación y transformación de las estructuras políticas, económicas y sociales que oprimen a las personas”. Así lo narró la doctora Lilia Vélez Iglesias, directora general Académica de la Institución.
Hoy la Universidad Jesuita celebra el segundo aniversario de la Clínica Jurídica Minerva Calderón, nombrada así en honor a la vida y obra de una mujer recordada por ser compasiva, respetuosa, considerara, soñadora, solidaria, bondadosa, y que siempre estuvo dispuesta a servir por y para los demás: Minerva Calderón Hernández, egresada de la Licenciatura en Derecho de la Universidad, y víctima de feminicidio en 2017.
“Recuperar el nombre de Minerva, además de servir como elemento de memoria histórica y recordatorio de la búsqueda de la justicia, también recoge la propuesta de poner a las víctimas en el centro, redignificando las condiciones de quienes sufren violaciones a sus derechos fundamentales y humanizando los procesos en los que estos se ven implicados”, dijo.
“Si pudiéramos poner un ejemplo de estudiantes que son conscientes, comprometidos, competentes, estaríamos mirando a la Clínica Jurídica”, enfatizó.
La vida y memoria de Minerva fue traída al presente de manera amorosa y orgullosa por sus padres, Minerva Hernández Rodarte y Marco Calderón Guzmán.
“Su legado es haber vivido en valores”, dijo la señora Minerva Hernández, quien agradeció a la Clínica y a los integrantes de la Comunidad Universitaria por el acompañamiento cercano a su caso.
Su padre, Marco Calderón, agradeció que se sigan realizando eventos que traigan a Minerva al presente, porque, en sus palabras, “la violencia nos la arrebató, pero a pesar de eso, sigue estando aquí”. Para ambos padres, la vida de Minerva es una motivación constante para que las nuevas generaciones siempre busquen la justicia, la bondad y el amor en su andar cotidiano.
Esa es la inspiración de las y los integrantes de la Clínica, quienes expusieron los avances y logros obtenidos en estos dos años. Actualmente, la instancia acompaña más de 30 casos que se encuentran en diferentes etapas procesales o de investigación.
Además, da seguimiento a otras iniciativas que han marcado precedentes en la región, como la defensa de los derechos de la ciencia y tecnología con el acompañamiento a integrantes del Sistema Nacional de Investigadores, el acompañamiento para la garantía de los derechos de autonomía y autogobierno, especialmente en la comunidad de La Candelaria, y la Declaración Especial de Ausencia para Personas Desaparecidas y No Localizadas.
Estas labores han construido un horizonte sólido para la Clínica Jurídica Minerva Calderón de la IBERO Puebla, que “no solo se ha convertido en un espacio de relevancia para la protección de los derechos humanos en el estado de Puebla, sino que también ha servido para formar hombres y mujeres libres, conscientes, competentes, compasivos, comprometidos y críticos para hacer frente a los problemas que se plantean en el país”, dijo el responsable de proyectos de la Clínica, el licenciado Joaquín Sánchez Cedillo.
Finalmente, el coordinador de esta instancia y de la Licenciatura en Derecho de la Universidad, el maestro Simón Hernández León, hizo un llamado a las autoridades poblanas para que se garantice la verdad y justicia en el caso de Minerva Calderón, que está próximo a cumplir siete años en total impunidad.