La guerra en Morena y la lucha por la candidatura a la gubernatura se va a incrementar entre más se aproxima la fecha para la definición del hombre o mujer que se encargará de tratar de mantener el control de Puebla para el presidente López y su partido político.
El duro golpe propinado hacia el senador Alejandro Armenta, a través de su hombre de confianza, su asesor, José Luis García Parra, alias “El Choco” por su adicción a los vehículos de lujo, solo es el inicio de las hostilidades al interior del partido hegemónico, el cual, como lo he pronosticado, se va a romper y llegará debilitado y dividido a la contienda del 2024.
El choque de trenes que una y otra vez advertimos en este espacio, se va a presentar de manera irremediable, es una ley de la física, para ser exactos corresponde a la tercera ley de Newton, la cual establece que a “toda acción, corresponde una reacción, en sentido inverso, pero con la misma intensidad”.
Durante el mandato de Miguel Barbosa, Armenta logró establecer una relación de respeto con el extinto mandatario, quien le disculpó todas las afrentas que se presentaron durante la contienda interna que se dio entre ambos personajes, tras la muerte de Martha Erika Alonso.
La relación Barbosa-Armenta se mejoró con el paso del tiempo y más aún, cuando ambos coincidieron en tener un adversario en común, el coordinador de los diputados federales de Morena y también aspirante a la candidatura a la gubernatura, Ignacio Mier Velazco.
En el equipo de Nacho, le adjudican a Alejandro Armenta y al extitular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Santiago Nieto, el haberle entregado a Miguel Barbosa el expediente que derivó en las acusaciones realizadas en contra del sobrino de Nacho, Moisés Mier “El Moi” y el entonces director del periódico Cambio y empresario, Arturo Rueda, así como también en contra del propio Ignacio.
El proyecto de Nacho parecía naufragar, sin embargo, las cosas cambiaron diametralmente tras la muerte del gobernador Miguel Barbosa y ahora las cosas han cambiado de tal forma que quien hoy luce contra la pared, es Alejandro Armenta.
De todos era sabido que una de las “debilidades” del proyecto “armentista” era precisamente el pasado, ligado a Mario Marín, preso en el penal del Altiplano y también a Javier López Zavala, el cual irónicamente también se encuentra recluido en el mismo lugar en donde está quien fuera su mentor.
Por cierto, cabe señalar que, José Luis García Parra, alias “El Choco”, es sobrino de doña Margarita García de Marín.
Pero eso no es todo, el ventilador ya está prendido y la “mierda” va a comenzar a salpicar a todos los que hoy buscan convertirse en candidatos, tanto a la gubernatura como a otros puestos de elección popular dentro de Morena.
Como dijera Jesús: “El que esté libre de pecado, que tire la primera piedra”; y es que, seamos sinceros, cualquier aspirante de Morena que busque hacerse de la candidatura a la gubernatura tiene “cola que les pisen”.
Desde las casas de lujo en las zonas más exclusivas de Puebla, que las lujosas camionetas mediante las cuales se trasladan, las Land Rover en las que viajan sus familias, los apartamentos de millones de pesos, los jugosos negocios de obra pública u otros rubros realizados al amparo del poder.
La famosa austeridad republicana se quedó solo en el discurso, se trata de una nueva élite, de nuevos grupos implicados en la pugna por el poder y todo lo que conlleva.
El discurso de la falsa austeridad republicana solo aplica para todos aquellos que no forman parte de esta nueva élite, la cual busca el usufructo del poder, porque como dijera el clásico, “para eso es el poder, para poder”.
Lo que se avecina es una lucha cruel y despiadada en donde no se sabe a ciencia cierta cuál de todos los aspirantes va a salir victorioso o si tal vez ocurra lo que han pronosticado algunos analistas, el que un tercero, tal vez sea el que aproveche la división para quedarse con la candidatura.
Así que hay que prepararnos para lo que se viene, a comprar la bolsa de palomitas y a divertirse, porque lo que se viene será de pronóstico reservado y a nadie le debe de espantar, diría el exgobernador Melquiades Morales Flores, el sabio de Santa Catarina los Reyes, “se trata de la lucha por el poder, no de la coronación de la reina de la primavera”.
No obstante, nadie debe de olvidar la tercera ley de Newton, “a toda acción corresponde una reacción”.
Estamos de regreso. Las Serpientes están de regreso, luego de un breve descanso.
Regresan cuando las cosas se ponen cada vez más interesantes en el tema de la sucesión gubernamental y estaremos dando cuenta de esta y muchas más nuevas historias.
[email protected]
Twitter: @riva_leo
Ilustración: Alejandro Medina
