No cabe duda que la experiencia en política es esencial para la sobrevivencia y mantener el liderazgo.
Algunos diputados locales del Partido Acción Nacional ya se frotaban las manos para buscar la coordinación de la fracción legislativa en sustitución de Eduardo Alcántara.
Éste joven político se jugó sus canicas con Genoveva Huerta para la dirigencia del PAN en el estado.
En su apuesta se enfrentó directamente a Eduardo Rivera, presidente municipal de Puebla, y a su grupo. Fue directo y sin escatimar el apoyo a su amiga.
La jugada falló, porque Geno traía muchos muertos en el clóset.
La amenaza, a través de la nueva dirigente panista Augusta Díaz de Rivera, fue quitarle la coordinación pero al final privó la capacidad de Eduardo Alcántara para seguir en el puesto.
Tampoco había mucha tela de donde cortar para un sustituto.
La más experimentada es su compañera diputada Mónica Rodríguez Della Vecchia y nada más, pero muy extremista y de difícil acuerdo.
En el escaparate político está la “promesa” Aurora Sierra, quien lo más destacado que se puede recordar de ella es el escándalo que protagonizó con su ex pareja sentimental Víctor Hugo Islas y que lo mandó a la cárcel.
Ah, y sus fotos de portada de la revista Hola que sube a sus redes. La promesa joven se está convirtiendo en una gris figura y así difícilmente podrá competir por la alcaldía de San Pedro Cholula y menos para la reelección.
Así Eduardo Alcántara puede seguir tranquilo en la coordinación, porque no tiene competencia interna y sus habilidades políticas lo avalan. Lalo Rivera lo va a necesitar para su futuro proyecto que no es menos.
Lalo Rivera, tu luna de miel se acaba
El presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez recibió el primer llamado en serio durante las pasadas elecciones de juntas auxiliares.
Él y su gente mostraron poco oficio político y se los dijo en su cara el gobernador Miguel Barbosa.
Además de que perdió con sus candidatos y solo obtuvo la victoria en dos de las 17 juntas auxiliares.
Le reventaron cuatro elecciones y es un llamado, si así lo sabe leer, de que la luna de miel con los poblanos se está acabando.
Levantarse temprano para ir a pintar banquetas, jugar con un perro callejero o ponerse un casco de Lego ya no es suficiente.
El manto protector se lo empiezan a jalar y le va a dar frío.
Fin
