A través de su cuenta en TikTok, la asesora de imagen, Luisa Peña, indicó que se encontraba en Acapulco, Guerrero por un evento de trabajo, y a dos horas de que hiciera impacto el huracán Otis, en el puerto.
La mujer, se encuentra varada en un hotel a las orillas de la costa y documentó los efectos del huracán en lugares de cualquier estrato social, como lo es el lugar donde se hospeda.
“En mi vida había estado en medio de un huracán y hoy estoy justo a dos horas de que pegue aquí en Acapulco, Guerrero, el huracán Otis. No es que haya planeado mis vacaciones, vine de trabajo, pero me parece que el universo tiene otros planes. ¿Se acuerdan de película “Hasta el viento tiene miedo”?, comentó.
En el vídeo también muestra el momento donde la tormenta ingresa a las instalaciones del hotel inundando el pasillo que se encuentra fuera de su cuarto.
“Dicen los de seguridad que el mejor lugar para resguardo, por el momento, es la habitación. No nos han evacuado y parece que en un momento dado nos van a mandar a resguardo. Les juro que es una impotencia, una sensación terrible, fuera de serie, estoy esperando que nos llamen y que venga seguridad y nos lleven a un albergue o quiero pensar que los del hotel saben cómo manejar una situación así. Es lo más aterrador, de verdad”, expresó.
Luisa logró grabar el momento en el que autoridades la llevaron al lugar de resguardo en el hotel Princess debido a que la estructura sufrió graves daños.
"¡Acaba de pasar lo más cañón!" 😰
Una joven que se hallaba en el #HotelPrincess, de #Acapulco, contó cómo fue su experiencia tras la llegada del huracán #Otis 🚨 pic.twitter.com/AcYhitZsgK— RETO diario (@retodiariomx) October 25, 2023
En este segundo clip, detalla que los pisos más altos fueron los más afectados, pues incluso logró saber que la habitación donde se había hospedado estaba completamente destruida, el techo se había caído, las ventanas se quebraron y se encontraba inundado.
“Acaba de pasar lo más cañón, literal estuve en el ojo del huracán. Me acaban de rescatar, en un momento, alrededor de las 11 de la noche se fue la luz y los vientos estuvieron a todo lo que da y me escondí en el clóset, me puse a rezar, a meditar y a tratar de calmarme aunque el pánico se apoderó de mí”, explicó.