Desde el primer minuto del próximo 14 de noviembre, personal de las secretarías de Gobernación y Seguridad Pública, respectivamente, montarán un operativo en las calles aledañas al primer cuadro de la ciudad con el objetivo de retirar a todos los vendedores informales con motivo del desarrollo de la cuarta edición de El Buen Fin.
Al respecto, el titular de la Secretaría de Gobernación, Guillermo Aréchiga Santamaría, negó un aumento en la cantidad de ambulantes, empero, se comprometió a reducir paulatinamente el número de vendedores a partir de enero.
Aréchiga Santamaría, dijo que una vez concluido El Buen Fin, los informales podrán regresar a las calles pero con el compromiso de respetar los acuerdos, como evitar piratería, esquinas libres de comercios para garantizar el paso peatonal y agilizar la circulación vehicular, no invadir entradas de negocios, entre otros.
Por su parte, el presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico, José Juan Ayala Vázquez, esperó que lo comprometido por Aréchiga Santamaría sea llevado a cabo, pues en caso de no ser así las ventas para los establecidos podrían disminuir hasta un 30 por ciento.
