Un muerto y otro “desaparecido” que estaba en Enfermería, se reportó en las últimas horas dentro del Centro de Reinserción Social (Cereso) de San Miguel, ubicado en el sureste de la capital del estado de Puebla.
El reporte de que faltaba un interno dentro del centro penitenciario movilizó incluso a personal de la Subdirección de Centros Penitenciarios de la Secretaría de Seguridad Pública, durante la noche y madrugada de hoy.
No obstante, por la mañana, en su videoconferencia de prensa, el gobernador Miguel Barbosa Huerta descartó que el interno se hubiera fugado y confirmó que en realidad el hombre estaba “olvidado” en Enfermería, y los encargados no lo habían reportado. Pero ya estaba aclarándose el hecho y el interno, de nombre Fernando, volvió a pasar lista ya de presente.
No obstante, también salió a la luz pública que, a la vez, un interno que estaba en los Dormitorios A fue hallado sin vida, sin huellas de violencia, por lo que, aparentemente, habría muerto por causas naturales.
Eso generó la presencia de peritos y agentes ministeriales de la Fiscalía General del Estado (FGE), quienes acudieron para realizar las diligencias del levantamiento de cadáver y ordenar su traslado al anfiteatro municipal para hacerle la autopsia de ley y determinar las causas exactas de la muerte. El interno se llamaba Armando y tenía 36 años.
