Entre los dirigentes de Morena y los estrategas del cuarto de guerra de su candidato a la gubernatura, Alejandro Armenta Mier, hay coincidencia en que el porcentaje de participación en los comicios locales del 2 de junio será del 60% o más.
Los estrategas de Armenta estiman que la participación será del 60% y el secretario general del Comité Ejecutivo Estatal de Morena, Agustín Guerrero Castillo, cree que llegará al 70%.
Sólo para contextualizar, sirve mencionar que en las elecciones de 2018 —con el tsunami llamado Andrés Manuel López Obrador— la participación en el estado de Puebla llegó casi al 57% de los inscritos en la lista nominal de electores.
En esa elección López Obrador computó en Puebla 1 millón 754 mil 596 sufragios.
En la elección extraordinaria de gobernador celebrada en 2019, tras la trágica muerte en diciembre de 2018 de la gobernadora Martha Erika Alonso y su esposo el senador Rafael Moreno Valle, el abstencionismo fue el gran ganador, ya que la participación electoral sólo llegó al 33%.
Luis Miguel Barbosa fue electo gobernador con 687 mil 341 votos, cifra muy menor a la que obtuvo en los comicios de 2018 —y que perdió en tribunales con Martha Erika Alonso— en los cuales sumó 1 millón 31 mil 43 sufragios.
Voto diferenciado
Aunque la consigna o el llamado de los dirigentes y candidatos de Morena a sus militantes y simpatizantes en este proceso electoral es votar parejo para lograr la ansiada mayoría calificada en el Congreso de la Unión y los Congresos locales, lo cierto es que el voto diferenciado ha sido la constante en las últimas elecciones.
En los comicios ordinarios de hace 6 años no todos los que votaron por López Obrador lo hicieron por el candidato de Morena y el PT a la gubernatura, Miguel Barbosa, ni por los candidatos de Morena, PT y PES a senadores y diputados federales.
Mientras por el candidato presidencial sufragaron 1 millón 754 mil ciudadanos radicados en el estado, por Miguel Barbosa sólo lo hicieron 1 millón 31 mil.
Entre los senadores y diputados federales de Morena, el PT y el PES que contendieron en 2018 también hubo voto diferenciado en la entidad poblana, ya que mientras Alejandro Armenta Mier y Nancy de la Sierra, que fueron nominados a la Cámara Alta, obtuvieron 1 millón 404 mil sufragios, la votación acumulada de los candidatos a diputados federales de estos tres partidos en los 15 distritos fue de 1 millón 380 mil.
Lo más probable es que en los comicios del próximo 2 de junio este fenómeno se repita y que quizás Alejandro Armenta, que es postulado por 5 partidos —3 nacionales y 2 locales—, consiga más votos que Claudia Sheinbaum, que va con los tres primeros institutos, y que los sufragios de aquel sean superiores a los que puedan obtener los 26 candidatos a diputados locales de la coalición Seguimos Haciendo Historia.
En ese sentido, creo que el llamado de los dirigentes y candidatos de Morena a votar parejo, es decir, a hacer el seis de seis, difícilmente se concretará.
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