Cuitlatlán
Por: Fermín García
Esta semana, en esta columna, se denunció que hace tres meses de manera ilegal se habrían vendido unas 4 millones de plantas de café –propiedad de la Sagarpa– destinadas a sustuir cultivos dañados por la plaga de la roya, lo cual tal vez representó un sucio negocio de entre 16 y 32 millones de pesos. El ex diputado federal priista Carlos Barragán mandó una carta con la intención de desmentir esa información, pero acabó constantando una parte fundamental de lo que se expuso: que las matas de cafetales sí se comercializaron en 5 pesos cada una, cuando se supone que debían ser gratuitas.
Esta es su misiva:
29 de agosto de 2018
Asunto: Réplica de nota informativa
Jornada de Oriente
Redacción
Hago uso de mi derecho de réplica a publicación con datos falsos en La Jornada de Oriente, con base en los siguientes puntos:
Primero: aclaro que Sagarpa en ningún momento me ha comprado planta de café.
Segundo: la planta de café la gestioné a través de 2 organizaciones para productores de 12 municipios del distrito y fue totalmente gratuita; nunca se ha cobrado una sola planta del listado aprobado por Sagarpa y esto puede ser corroborado con los 1500 beneficiados.
Tercero: la cantidad que aprobó Sagarpa para mis compañeros productores fue 1 millón 280 mil plantas de café, por medio de las 2 organizaciones, más no los 4 millones que erróneamente indica la nota. Cabe señalar que el precio autorizado por la dependencia fue de 5 pesos por planta.
Cuarto: las plantas que se encuentran sembradas en mi finca de café son desde hace 22 años, y jamás he recibido un apoyo en plantas de café por parte de alguna dependencia, hecho que puede confirmarse en la misma Sagarpa y en su página de transparencia.
Quinto: afirmo que, a lo largo de mi gestión, misma que está por culminar, he logrado conseguir innumerables apoyos para la gente que represento. Jamás he cobrado un solo peso por la gestión y por servir, pues esto iría en contra de mis principios y la rectitud por la cual siempre me he conducido.
Por último, pido que si a algún productor le fue cobrado un solo peso lo declare públicamente y con ello dar cuenta que en ningún momento se solicitó pago alguno con tal de recibir los beneficios.
Ha sido un gran honor servirle a mi distrito y compartir mi tiempo, esfuerzo y también hasta mi sueldo con la gente que más me necesitó. Quedo a sus órdenes para cualquier aclaración futura y agradezco su atención.
Atentamente
Lic. Carlos Barragán Amador
Diputado Federal
Respuesta del columnista
La carta de Carlos Barragán Amador no aclara nada ni desmiente lo publicado el miércoles de esta semana, de que habría existido una venta ilegal de 4 millones de plantas de café, que se supone eran para combatir la plaga de la roya en la Sierra Norte de Puebla. Sobre la misiva del priista es necesario responder lo siguiente:
Primero: Carlos Barragán mandó su carta con papel membretado de la Cámara de Diputados lo cual es algo incomprensible, ya que está fechada el 29 de agosto, día en que ya habían tomado posesión los nuevos legisladores y por tanto el señor Barragán Amador ya no era representante popular ¿Esto no es una usurpación de funciones?
Segundo: en la misiva me da la razón. Al principio dice que las plantas de café de la Sagarpa fueron gratuitas para los productores y luego reconoce que si tuvieron un precio de 5 pesos. Eso es precisamente lo que denuncié, que de manera indebida se comercializaron las plantas entre 4 y 8 pesos cada una.
Es grave que reconozca Barragán Amador que las plantas se vendieron en 5 pesos, ya que hasta donde se sabe los beneficios entregados por Sagarpa no tienen ni cuota de recuperación ni son mercancías, por lo que es ilegal pedir dinero a cambio.
Lo más lamentable, me contaron miembros de asociaciones de productores, es que se tiene la sospecha de que ese dinero de la venta de plantas no ingresó a la Sagarpa, sino fue un pingüe negocio de alguien que lucró ilegalmente con el programa de sustitución de cultivos para combatir el hongo de la roya.
Tercero: en la columna nunca dije que la Sagarpa le compró a Carlos Barragán las plantas de café, sino que se utilizaron sus terrenos ubicados en el camino a San Antonio –donde el priista tiene un beneficio de café– para sembrar y cuando las matas ya estuvieron crecidas, desde ahí se repartieron y se habrían vendido de manera indebida. Un asunto del que deben responder funcionarios públicos involucrados.
La misma fuente apunta que si fueron 4 millones de plantas las que se distribuyeron, un número creíble si se toma en cuenta que a nivel nacional fueron 60 millones de plantas y por el grado de afectación que la roya ha dejado en Puebla.
Cuarto: no veo que sentido tiene para Carlos Barragán presumir que logró “innumerables” apoyos durante su gestión como diputado federal. Cuentan en Xicotepec de Juárez y en Huauchinango que en los últimos tres años no hubo obras públicas gestionadas por el ex legislador federal, a excepción del techo de un mercado en el segundo de estos municipios.
Es decir, los beneficios no son “innumerables” si no se cuenta con la mitad de los dedos de una mano.