Puebla, Tehuacán, Chignahuapan, Xicotepec, Tlachichuca, San Pedro Cholula y Ciudad Serdán, registran los créditos más altos; en puerta la aprobación de nueva línea de préstamo
Además de la capital poblana, seis municipios del interior del estado representan la mayor parte de la deuda pública del estado que al primer trimestre de 2013 es de 9 mil 35 millones 885 mil pesos, sin embargo ocho municipios heredarán créditos y contratos PPS a las siguientes administraciones, lo que incrementará los pasivos a 10 mil 535 millones 885 mil pesos.
Los municipios mayormente endeudados son Puebla, Tehuacán, Chignahuapan, Xicotepec, Tlachichuca, San Pedro Cholula y Ciudad Serdán; a pesar de tener créditos con la banca el Congreso del Estado autorizó a cuatro de ellos establecer contratos a diez años con la iniciativa privada para mejorar el servicio de alumbrado público.
Además, las deudas que pesan sobre las administraciones municipales serán heredadas a los próximos alcaldes electos, ya que se establecieron pagos que extralimitan las gestiones de los actuales ediles.
En ese caso se encuentran los ayuntamientos de Tehuacán y Tlachichuca, a cuyos ediles recientemente les fue autorizado sendas líneas de crédito por 41 millones 250 mil pesos y 30 millones 87 mil pesos, respectivamente, y cuyos pagos se realizarán en más de diez años.
Según un análisis de deuda de estados y municipios de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), entre las causas del aumento de la deuda se destaca un componente estructural, que se caracteriza por la vulnerabilidad de los ingresos vinculados con las participaciones fiscales y por el incremento del gasto.
Adicionalmente, en el gasto también inciden factores contingentes (desastres naturales) y discrecionales (erogaciones sin impacto social y económico que las justifiquen) que agravan el déficit y la necesidad de financiarlo.
Algunos municipios arrastran la deuda de años anteriores, aunque cabe resaltar que en 2009 se manifestaron ampliamente los efectos de la crisis económica y financiera internacional, que en la economía mexicana ocasionó una disminución del crecimiento económico (-6.0% del PIB).
Dicho escenario redujo el monto de las participaciones federales y significó uno de los detonadores del incremento de la deuda pública, aunado a la ausencia de otras medidas de ajuste a las finanzas públicas para aumentar ingresos y disminuir gastos.
En el 2010, Puebla adquirió deuda por 2 mil 500 millones de pesos con BBVA Bancomer a pagar en un plazo de 240 meses, casi tres sexenios, mismos que fueron destinados a construcción de obra pública productiva.
Un año después, ya con la nueva administración, el gobierno estatal contrató un crédito con la misma institución financiera por mil 249 millones de pesos a liquidar en un plazo de 62 meses, más de cinco años, los cuales se destinarían a infraestructura pública. Mientras que en el 2012 solicitó una línea de crédito por 961 millones 594 mil 553 pesos para inversión en obra pública productiva, a pagar en un plazo de 240 meses.
La deuda actual del estado, según el último reporte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), es de 9 mil 35 millones 885 mil 873.63 pesos, de los cuales 378.8 millones corresponde a organismos estatales, 775.8 millones a municipios y 2 mil 88.6 millones de pesos a organismos municipales.
Hasta 1,500 mdp en PPS para alumbrado
Los 17 ayuntamientos que solicitaron el aval al Congreso del Estado para establecer contratos con la iniciativa privada en materia de eficiencia energética del alumbrado público, representarían un pasivo para el estado de alrededor de mil 500 millones de pesos.A través de los PPS (Proyectos para Prestación de Servicios), los municipios adquirieron un compromiso con inversionistas privados cuyos contratos van de los 20 hasta los 160 millones de pesos, dinero que deberá ser liquidado a las empresas en un periodo de 10 años.
Los legisladores aprobaron la semana pasada los esquemas bajo los cuales 17 municipios podrán sustituir el alumbrado público por tecnología moderna, que les generará en promedio hasta el 40 por ciento de ahorros, sin embargo ocho de ellos tienen deuda pendiente de liquidar.
En ese caso se encuentran los municipios de Acatlán, Atlixco, Ciudad Serdán, Libres, San Pedro Cholula, Tecamachalco y Tlachichuca.
El pasado 23 de agosto el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas presentó una iniciativa para que los presidentes municipales electos soliciten créditos por hasta 3 mil millones de pesos, así como préstamos hasta por el 25 por ciento de los ingresos del Fondo para la Infraestructura Social Municipal, dicha solicitud está aún en análisis en el Congreso del Estado, sin embargo no se descarta que pueda ser aprobada en el tercer periodo ordinario de sesiones que iniciará el próximo 15 de octubre.
Municipios se endeudan y heredan los pasivos
De los créditos contratados con el Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras) para los municipios para el plazo de 2011 a 2014, se desprende que la capital adquirió deuda por 200 millones de pesos, mientras que el municipio de Xicotepec por 25.8 millones pesos e Ixtacamaxtitlán por 10.5 millones de pesos, siendo los vales más altos.
Le sigue Tetela de Ocampo con 9.5 millones de pesos solicitados, Quimixtlán con 6.9 millones, Atzitzihuacán con 4.5 millones, Xiutetelco con 3.5 millones y Acatlán con 3 millones de pesos; Guadalupe Victoria adquirió deuda por un millón de pesos, mientras que Teopantlán, Caltepec, Acateno, San Nicolás Buenos Aires y Tlanepantla, no rebasaron los 2 millones de pesos de deuda.
Los créditos autorizados bajo el esquema de afectación de hasta el 25 por ciento del Fondo de Infraestructura Social Municipal (FISM) fueron para los municipios de Santiago Miahuatlán (2.8 millones de pesos), Zapotitlán (1.7 millones de pesos) y Xochitlán Todos Santos (1.9 millones de pesos).
En mayo del año pasado, el Ayuntamiento de Acatlán adquirió un crédito por 3 millones de pesos con Banobras, y se estableció como plazo mayo de 2014 para liquidarlo, cabe recordar que el edil actual concluirá su mandato en febrero del próximo año por lo que el resto de la deuda tendrá que solventarlo el próximo presidente municipal.
La misma situación ocurrirá en Quimixtlán, en donde el edil actual solicitó autorización para contratar deuda por 6 millones 949 mil pesos en agosto de 2012, sin embargo tiene como plazo para liquidarla hasta abril de 2014.
Zacatlán es otro de los municipios que heredará deuda a la próxima administración, ya que en abril de 2012 el actual edil solicitó un crédito por 1 millón 773 mil pesos para destinarlo a inversión pública productiva, sin embargo el préstamo deberá ser liquidado en marzo del próximo año, un mes después de que tome protesta al cargo el actual presidente electo.
Cabe recordar que en 2012, el Congreso del Estado autorizó a los municipios de Huauchinango y Libres contratar deuda por 30 y 11.4 millones de pesos, respectivamente, a pagar en un periodo de 15 y seis años.
Por otra parte, 14 ayuntamientos contrataron deuda por montos de entre un millón y hasta los 20 millones de pesos a pagar antes de que concluyan las actuales administraciones municipales, como es el caso de Acateno, Atzitzihuacán, Caltepec, Chignahuapan, Ixtacamaxtitlán, San Nicolás Buenos Aires, San Salvador Huixcolotla, Santiago Miahuatlán, Tecomatlán, Teopatlán, Tepexi de Rodríguez, Tetela de Ocampo, Xicotepec y Xiutetelco.