La renovación del Instituto Estatal Electoral (IEE) se hizo sin guardar las formas mínimas, sin sustentar nada ni mejorar la calidad de sus integrantes.
Por lo que este día al aprobarse la conformación del nuevo Consejo General del IEE quedará compuesto por: cuatro consejeros que fueron puestos directamente por el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas y tres por el PRI, lo cual llevará a que la mayor parte de ese órgano quedará en manos de personajes comprometidos con las cúpulas políticas y no con la legalidad y la transparencia de los comicios locales.
De los nueve consejeros del IEE, el PAN solamente podrá poner a dos de los integrantes del instituto, y todo hace suponer que se trata de dos integrantes del organismo que serán ratificados y que podrían ser: Fidencio Aguilar Víquez y Olga Alicia Lazcano Ponce, mientras que la izquierda y el PVEM quedarán marginados. No tendrán consejeros propietarios y a lo mucho les dejarán dos o tres suplentes.
El problema de fondo no es cómo se acabaron repartiendo las “cuotas” entre las fracciones del Congreso, sino que nunca se revisaron trayectorias académicas y que los aspirantes tuvieran la suficiente preparación en materia electoral, y no se buscó a personajes que no sean ciudadanos vinculados a grupos o figuras ligados a las cúpulas de los partidos o del Poder Ejecutivo.
Hace seis años, pese a que fue severamente cuestionada la manera en que se integró el IEE, por lo menos se respetaron algunas formas y equilibrios, como fue haber concedido una posición a un personaje propuesto por el Tribunal Superior de Justicia –que fue Jorge Sánchez Morales–, otro más por la UAP y otro por la Universidad de las Américas.
Ahora, en el caso de siete de nueve consejeros, únicamente se cuidó las propuestas que llegaron directamente de Casa Aguayo y que otros tres estén ligados al PRI, llegándose al extremo que de posiblemente será electo una persona que fue directamente recomendada por Luis Videgaray, quien fue el coordinador de la campaña presidencial priista de hace tres meses.
Y lo más grave todavía es que existen muchas posibilidades de que al final sean ratificados cuatro o cinco de los actuales consejeros del IEE, pese a que fueron corresponsables del mal prestigio que arrastra el instituto como resultado de decisiones que adoptaron y que, en varias ocasiones, fueron cuestionadas por el PAN y el grupo político de Rafael Moreno Valle Rosas, cuando éste era candidato a la gubernatura.
¿Entonces, qué pasó? Esta situación pone en evidencia dos aspectos: que el constante golpeteo político contra el IEE fue solamente para debilitar la institución y justificar no ratificar a una parte importante de los consejeros, para acabar poniendo a personajes ligados al gobierno de Moreno Valle.
Y que una parte importante de los consejeros son “veletas”, ya que se mueven de acuerdo a los intereses del titular del Poder Ejecutivo en turno.
Antes eran condescendientes con los intereses electorales de Mario Marín, y ahora se ofrecen para actuar de igual manera con el grupo morenovallista.
Hasta ayer por la noche, todavía había ajustes a los que será la lista final de aspirantes que serán votados este día en el pleno del Congreso.
Más allá de los nombres, el gobernador tendrá cuatro consejeros, mismos que seguramente estarán controlados desde la Secretaría General de Gobierno.
Todo indica que esas cuatro figuras son Víctor Joaquín Canovas Moreno, Alejandra Guadalupe Esquitin Lastiri –que es una posición que se da a una conocida familia da caciques de la Sierra Norte–, el empresario José Gustavo Garmendia Domínguez y Armando Guerrero Ramírez.
Estos cuatro personajes, en caso de que queden, son los que se deberá revisar su actuación con lupa.
Ya que seguramente serán los que protejan los intereses del morenovallismo hacia el interior del IEE.
Sin importar que la presidencia recaiga en Olga Alicia Lazcano Ponce o en Paul Monterrosas Román, este último ligado a las simpatías del PRI.
Y seguramente esos cuatro consejeros ligados al morenovallismo harán mayoría con los personajes ligados al PRI, toda vez que los intereses del gobernador se están estrechando a los del tricolor en la medida en que avanza su gobierno.
