Francisco Rodríguez Álvarez es “el bueno”… de la ultraderecha.
Así como en el grupo morenovallista se visualizan finalistas muy claros en la puja por la candidatura del PAN a la presidencia municipal de Puebla, en el bando contrario, el de la Organización, también comenzó a reducirse la lista de suspirantes hasta llegar a uno solo.
Cuentan de ese lado, del ‘ala’ dura del panismo, que el precandidato que llega a la recta final con una mayor suma de voluntades es Francisco Rodríguez Álvarez, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, quien incluso pasó por encima de los acuerdos que Pablo Montiel Solana traía con el edil Eduardo Rivera Pérez.
Así lo expresan, sin desparpajo, los integrantes del panismo tradicional.
Dentro del mismo ayuntamiento, donde gobierna Rivera, es de conocimiento público que la estructura se cargará a favor del dirigente empresarial.
“Están buscando posicionarlo a como dé lugar”, me dice una fuente.
“Toda la ultraderecha está con ‘Franco’. Ya están más que alineados”, afirma otra.
“De verdad, es toda la maquinaria, todo mundo lo cuenta”, subraya una tercera.
Como usted verá, las versiones del “radiopasillo” dan por hecho que Rodríguez Álvarez será la carta del Yunque para participar en la contienda interna, y la pieza esperada por una buena parte de sus miembros para enfrentar desde las trincheras panistas al “delfín” del gobernador, sea quien sea.
Pablo Montiel, que aspira al mismo cargo de elección popular, sabe que los dados se han cargado en sentido opuesto a sus intereses pero se niega a claudicar.
El secretario de Gobernación municipal considera que tiene serias posibilidades de ganar una elección interna y no quiere que se le descalifique desde ahora.
Que Eduardo Rivera se sume a la solicitud de los jefes de la Organización lo tiene muy molesto, tanto que ha usado a su hermano Carlos de ariete para ‘tundirle’ a Francisco Rodríguez y al presidente municipal.
El lunes, Carlos Montiel Solana expuso, a nombre de la Coparmex, que exigiría una explicación al presidente del CCE por las reuniones que sostuvo con ciudadanos de la capital en un par de juntas auxiliares, así como por los encuentros que estaba llevando a cabo con militantes y líderes panistas, de manera personal.
Si el trasfondo de las reuniones tenía que ver con intereses políticos de carácter individual, agregó el hermano de Pablo, propondría al seno de la Comisión Ejecutiva del CCE solicitarle la renuncia.
El amago no se quedó en eso.
Al día siguiente, aprovechando la reunión mensual de esa Comisión Ejecutiva, que se dio en el marco de la visita de Claudio X. González al Club de Empresarios, Carlos cumplió el aviso y sometió al escrutinio de los representantes de la iniciativa privada a su presidente.
Francisco Rodríguez comentó que todas las reuniones habían sido informales, que no llevaban trasfondo político y que menos tenían que ver con el interés de buscar la presidencia municipal.
Por supuesto, mintió, pero recibió el respaldo de los líderes camarales y hasta anunció el próximo lanzamiento del “Programa Súmate”, un esfuerzo de acercamiento con la sociedad civil que se impulsará desde el CCE.
¡Vaya casualidad!
Junto con este esfuerzo por llevar contra la pared al rival de su hermano, Carlos Montiel ha sido un implacable crítico de la inseguridad pública en la ciudad.
Cualquier declaración vertida en este sentido le pega, sin querer queriendo, al presidente municipal.
Como sea, las expresiones del dirigente de Coparmex sirven para evidenciar lo que ocurre en el PAN de cara a las elecciones de 2013, y dan luz para creer que, por lo menos del lado del Yunque, ya se tiene la identidad del ‘bendecido’.
Por cierto, y para terminar, en el PRI cruzan los dedos porque sea ‘Franco’ el candidato del PAN a la alcaldía poblana.
Usted dirá.