La Cámara de Diputados aprobó en lo general el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2026, con 358 votos a favor, 133 en contra y cero abstenciones, para un gasto neto total de 10 billones 193 mil 683.7 millones de pesos, equivalente a un incremento real de 5.9% respecto a lo aprobado en 2025.
El dictamen, derivado del Paquete Económico remitido por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, establece que 69.6% del gasto será programable –orientado a bienes, servicios y obra pública–, mientras que 30.4% corresponde a erogaciones no programables, como participaciones a estados y municipios, deuda y adeudos de ejercicios fiscales anteriores.
Enfoque social y obras estratégicas
La presidenta de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, Merilyn Gómez Pozos (Morena), señaló que el proyecto mantiene en el centro a las personas, al destinar más de 987 mil millones de pesos a programas del bienestar que beneficiarán a más del 82% de las familias mexicanas.
En materia de salud, se contempla una asignación de 965 mil 662.8 millones de pesos, un alza real de 5.8%, incluyendo la creación del Ramo 56 para Servicios de Salud del IMSS-Bienestar, con 172 mil 492 millones de pesos.
El sector educativo contará con 1.1 billones de pesos, 3.6% más que el año anterior, mientras que en seguridad y justicia se proyectan 343 mil millones de pesos, con un aumento de 17.6% en el rubro de asuntos de orden público y seguridad interior.
En infraestructura, el presupuesto prevé 215 mil millones de pesos para proyectos ferroviarios, carreteros, hidráulicos y portuarios. Entre las obras emblemáticas destacan el Tren Maya, con 30 mil millones de pesos, y el Tren Interoceánico, con 25 mil millones.
Entre los programas sociales prioritarios, la Pensión para Adultos Mayores absorberá 526 mil 508 millones de pesos, las Becas Benito Juárez sumarán 184 mil 595 millones, y Sembrando Vida contará con 40 mil 664 millones.
Debate marcado por tensiones y acusaciones
La discusión en el Pleno estuvo marcada por un ambiente tenso tras el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, tema que polarizó el debate entre oficialismo y oposición.
Durante la sesión, diputados del PAN, PRI y Movimiento Ciudadano calificaron el paquete económico como “centralista” y alertaron sobre un posible endeudamiento excesivo y recortes a sectores clave como salud, educación, cultura y seguridad.
El panista Germán Martínez advirtió que se trata de un “presupuesto centralista” que concentra los recursos “en Palacio Nacional”, mientras que Claudia Ruiz Massieu, de la bancada naranja, acusó que el gasto en salud está dirigido a la administración del IMSS-Bienestar “y no a las necesidades reales de la población”.
Por su parte, Mario Zamora Gastélum (PRI) afirmó que, aunque se trata del presupuesto “más grande en la historia de México”, se solicita “mucha deuda” sin claridad “para quién y para qué”.
En contraste, Sergio Gutiérrez Luna (Morena) defendió que es “un presupuesto de corte social” que garantiza la continuidad de los programas de bienestar por octavo año consecutivo.
También el coordinador del PT, Reginaldo Sandoval, respaldó el dictamen al considerar que promueve el bienestar social y la certidumbre económica “bajo los principios del humanismo mexicano respaldado por la ciudadanía”.
Próxima discusión en lo particular
Tras la aprobación en lo general, la presidenta de la Mesa Directiva, Kenia López Rabadán, informó que la discusión en lo particular iniciará mañana miércoles, con mil 708 reservas presentadas por las distintas bancadas, incluidas 12 que plantean modificaciones sustantivas al proyecto.




