La Fiscalía General de la República (FGR) ha abierto una carpeta de investigación contra Enrique Peña Nieto, expresidente de México, por presuntos sobornos de 25 millones de dólares vinculados a la compra del sistema de espionaje Pegasus durante su mandato (2012-2018). La indagatoria se basa en una investigación periodística israelí que reveló declaraciones de empresarios acusando al exmandatario de recibir pagos millonarios para facilitar la adquisición del software espía.
En la conferencia matutina del martes 8 de julio en Palacio Nacional, el fiscal Alejandro Gertz Manero confirmó que la FGR solicitará información formal al gobierno de Israel, mediante el sistema de asistencia jurídica internacional, con el fin de incorporar dichas declaraciones dentro de un marco legal. “Queremos evitar que el caso quede en el vacío de denuncias sin pruebas, como ocurrió en el pasado”, subrayó.
Gertz explicó que, a pesar de que anteriormente hubo denuncias contra Peña Nieto por casos similares, estas no procedieron por falta de pruebas suficientes. Ahora, las nuevas evidencias son “específicas, claras y precisas”, lo que permite reabrir el caso. Además, advirtió que la relación bilateral con Israel ha sido difícil, especialmente por su negativa a extraditar exfuncionarios mexicanos implicados en graves violaciones a derechos humanos, como en el caso Ayotzinapa.
El escándalo Pegasus ha provocado gran controversia en México, ya que se utilizó para espiar a periodistas, defensores de derechos humanos y opositores políticos. Durante la administración de Peña Nieto se adjudicaron contratos multimillonarios para adquirir el software, desarrollado por la empresa NSO Group.
El propio Peña Nieto negó los señalamientos, argumentando que se trata de pleitos entre particulares sin relación directa con él.