Las personas que murieron por Covid-19 o por alguna otra causa pueden permanecer cerca de sus seres queridos a través de unos tiernos osos de peluche fabricados con los suéteres, camisas, blusas, sacos e incluso pijamas de los fallecidos.
Esto es posible gracias al trabajo de Eréndira Guerrero, artesana mexicana que los confecciona para ofrecer consuelo a quienes por causa de esta enfermedad han perdido a alguien amado.
Los ositos miden aproximadamente 50 centímetros de alto y sus brazos y piernas tienen movilidad; se les puede coser un texto personalizado y añadirles voz, ésta podría ser la de la persona fallecida.
De acuerdo con la artesana, hacer los osos le lleva entre tres y cuatro horas, tiempo en el que corta, cose y rellena de felpa hipoalergénica estos objetos.
Eréndira confecciona cada uno de los ositos apapachables mientras sus hijas administran Late-lita.com, sitio web en el que estos se venden. El precio depende de los detalles, si se les añade un texto personalizado o voz; pueden hacerse con tela nueva o con la prenda, lavada y planchada que los clientes envíen a la dirección que se les indique.