En tanto, el Dr. Rogelio Pérez Padilla, del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), señaló que el 30% de las enfermedades respiratorias tristemente se relacionan con fumar. El tabaco afecta los mecanismos de defensa del organismo que, por ejemplo, nos protegen ante la COVID 19. Fumar predispone al agravamiento y los desenlaces fatales por COVID 19, estableció.
Por ello, dijo, la cesación es vital para los fumadores actuales durante la pandemia. En ese sentido, apoyó la reforma a la ley sobre tabaco porque “evitaría gastos gigantescos en salud y acabaría con el rezago que arrastramos en Latinoamérica”. Y aseguró: “Estamos ante una excelente oportunidad de ponernos al día, en favor de la salud y de la economía
el país”.
En tanto, el Mtro. Erick Antonio Ochoa, director de Salud Justa MX, apuntó que a 13 años de aprobada la Ley General para el Control del Tabaco, y pese a que hubo más de cien
iniciativas de todos los partidos para actualizarla, y a que de enero de 2020 a marzo de 2021, se presentaron 18 iniciativas más a favor, “de nuevo corremos el riesgo de sufrir la
interferencia de las tabacaleras”.
Consideró que México es el laboratorio de la industria para probar sus peores prácticas en el Latinoamérica, con base en lo cual llamó a la congruencia política a los diputados Ignacio Mier (Morena), Juan Carlos Romero Hicks (PAN), René Juárez (PRI) y de los demás integrantes de la Junta de Coordinación Política, para que no le fallen el país.
Y señaló a los diputados Fernando Galindo (PRI) y Ricardo DelSol Estrada (Morena), de servir a los intereses de la industria tabacalera, sin importarles que millones de niñas,
niños y adolescentes se hagan adictos a la nicotina.
A su vez, Jaime Barba, exfumador quien vive con EPOC y cuyos progenitores fallecieron por fumar, dijo que con un simple “Sí”, los diputados pueden cambiar la vida de millones
de fumadores y ex fumadores al aprobar el dictamen de la Comisión de Salud para
reformar la ley.
Nos es justo que por cada peso que recibe el SAT de impuestos de las tabacaleras, el gobernó gaste 2.50 pesos para atender los problemas derivados de fumar, dijo, y añadió
que la salud no se debe negociar con las tabacaleras.
“Si en realidad queremos que las cosas cambien, los legisladores deben de estar a la altura de lo que la población necesita y
quiere. No deben fallarle a quienes los eligieron”, puntualizó.