El juez de Primera Instancia del Ramo Penal del Distrito de Huixtla dictó auto de formal prisión en contra de Pablo Salazar Mendiguchía por el delito de homicidio doloso (comisión por omisión), por la muerte de la menor Guadalupe Silvestre Vázquez, quien perdiera la vida en el Hospital General K de Comitán de Domínguez en diciembre de 2002.
Pablo Salazar Mendiguchía también se encuentra procesado por la muerte de los pequeños gemelos Gerardo y Jesús Alejandro Morales Alfaro, y de Arturo Enrique Hernández Solís, quienes fallecieron a consecuencia de la falta de recursos públicos en el nosocomio, lo que derivó en múltiples irregularidades como la falta de medicamentos, instrumental y equipos médicos en las áreas de gineco-obstetricia y pediatría.
Lo anterior, de acuerdo con la recomendación 24/2004 que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos emitió y que el gobierno del propio Salazar Mendiguchía aceptó en todos sus términos, según consta en el oficio firmado y dirigido por el entonces procurador general de justicia, Mariano Herrán Salvatti, al presidente de la CNDH