El tráfico de fentanilo desde México hacia Estados Unidos se ha convertido en una preocupación crucial para la seguridad nacional, según Liz Sherwood-Randall, asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca. Durante una conferencia sobre seguridad nacional y contraterrorismo organizada por el Council on Foreign Relations (CFR), Sherwood-Randall afirmó que México es la principal vía por la cual el fentanilo llega a territorio estadounidense.
En sus declaraciones, la funcionaria destacó que las autoridades mexicanas son conscientes del peligro que esta droga representa para su propia nación. En este sentido, se está trabajando en múltiples dimensiones para abordar este problema, y el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha colaborado estrechamente con Estados Unidos en la lucha contra el fentanilo.
Sherwood-Randall enfatizó la importancia de la cooperación entre ambos países y mencionó la labor conjunta con los militares mexicanos, especialmente con la Marina, para interceptar la llegada de fentanilo. La droga ingresa a Estados Unidos en diversas formas, como píldoras o polvo, y se ha trabajado directamente con el presidente de México para enfrentar este desafío.
Estados Unidos ha señalado a China como uno de los países responsables de la situación, acusando al gigante asiático de permitir el envío de precursores químicos utilizados en la fabricación del fentanilo hacia México. Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, manifestó que muchos de estos precursores químicos son legales, pero llegan ilícitamente al país vecino desde China.
La crisis de salud pública desencadenada por el fentanilo en Estados Unidos es alarmante. Esta droga, un opioide sintético entre 50 y 100 veces más potente que la morfina, se mezcla con otras sustancias para aumentar su efecto y ha causado la muerte de 100 mil personas por sobredosis en el último año.
Ante esta situación, se ha generado tensión entre Estados Unidos y México, ya que Washington exige mayores esfuerzos por parte de su vecino para frenar el tráfico de fentanilo. Algunos sectores republicanos incluso han solicitado una intervención militar en territorio mexicano. En respuesta, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha negado que su país sea el lugar de fabricación del fentanilo y ha afirmado que la droga llega directamente desde China, principalmente a Estados Unidos.
La problemática del fentanilo requiere de un enfoque conjunto y coordinado entre Estados Unidos, México y China, a fin de combatir eficazmente esta peligrosa droga y proteger la salud y seguridad de ambos países.