Este jueves fue aprobado, por parte de la Comisión Europea, un proyecto de recomendación que condiciona la prolongación de la validez del certificado COVID a la administración de una dosis de refuerzo de la vacuna.
Esta propuesta necesita la aprobación de los Estados de la Unión Europea (UE) para que pueda entrar en vigor.
Aboga por limitar la validez del certificado a un periodo de nueve meses, lo que haría obligatorio recibir una nueva vacunación a partir de ese plazo para poder disponer de ese documento.
La Comisión propone que las nuevas normas entren en vigor a partir del 10 de enero de 2022.
En principio, el certificado no tenía fecha de caducidad en el caso de la vacuna, pero Bruselas considera necesario limitar temporalmente su validez tras haber constatado que la protección se reduce con el tiempo.
Siendo así, Bruselas confía en que las nuevas normas contribuyan a acelerar las campañas de vacunación, que en muchos países se han estancado en un nivel por debajo del 70% de la población y en algunos ni siquiera ha llegado al 50%.