Durante el amanecer de este miércoles se registró una fuerte explosión que golpeó un centro de pruebas de coronavirus al norte de Ámsterdam, afortunadamente hasta el momento no se ha reportado ningún herido, únicamente se mencionan algunas ventanas rotas, la policía holandesa ya se ha pronunciado al respecto mencionando que todo parece indicar que fue un ataque intencional.
Un equipo antibombas ya se encuentra en el sitio, en la ciudad de Bovenkarspel, a unos 55 kilómetros aproximadamente de la capital. Hasta el momento la policía del lugar dio a conocer que sí se pudo recuperar un cilindro de metal involucrado en la explosión.
“Debe haber sido colocado allí, Algo así no sucede por accidente”, comentó Menno Hartenberg portavoz de la policía.
Por otra parte el jefe del servicio de salud, André Rouvoet se mencionó al respecto y pidió la pronta detención del perpetrador.
”Nuestra gente en todo el país está trabajando arduamente para proteger a la sociedad de esta pandemia”, expresó Rouvoet, jefe del servicio de salud.
”Un acto de destrucción tan cobarde no solo afecta a nuestros empleados en Bovenkarspel. Esto nos afecta a todos” finalizó.
Al momento se sabe que fue un guardia de seguridad en el centro de pruebas quien dio aviso a las autoridades de una “fuerte explosión” la cual únicamente quebró algunas ventanas, poco antes de las 7 am.
Se menciona que este incidente ocurre unos cuantos días, antes de las elecciones nacionales del 17 de marzo, y debido a esto es ampliamente visto como un referéndum sobre el manejo de la pandemia por parte del gobierno.
Gran parte de las autoridades de salud han sido severamente criticados y se han ganado el enojo de gran parte de la población, que ha pronunciado no estar de acuerdo en la forma en la que se ha tratado esta pandemia.
Cabe recordar que otro lugar de pruebas cercano a la ciudad de Urk había sido incendiado durante varios días en el mes de enero, estos incendios fueron provocados por la introducción de un toque de queda nocturno.
“Después del incidente en Urk, aumentamos la seguridad como creo que lo hicieron la mayoría de los lugares en los Países Bajos”, expresó Harry Katstra, portavoz del servicio de salud regional de Hollands Noorden.
En cuanto a la ciudad donde se llevó el ataque de este miércoles se caracteriza por ser una ciudad rural la cual se menciona, está sufriendo actualmente uno de los peores brotes de covid-19 en los Países Bajos, con un total 181 casos por cada 100 mil habitantes, en comparación con alrededor de 27 por cada 100 mil a nivel nacional.
Al menos un hospital ha enviado pacientes a otras provincias debido a la falta de camas de cuidados intensivos.
Este día miércoles fue el primer día en varios meses en que las medidas de bloqueo holandesas se suavizaron ligeramente y se ha dado la autorización de reapertura de las peluquerías y las tiendas no esenciales que aceptaron un pequeño número de clientes con cita previa.