La localidad española de Buñol (este) ultima los preparativos para celebrar su batalla de lanzamiento de tomates o “tomatina”, que este año será de pago por primera vez.
Con la idea de reducir a menos de la mitad la presencia de participantes, que llegó a 50.000 personas en otras ediciones, las autoridades locales decidieron aplicar este año un sistema de entradas a diez euros (unos 13 dólares)
Se trata de favorecer la seguridad de esta fiesta de interés turístico internacional en la que este año unas 20.000 personas se enzarzaran en una batalla en la que emplearán 130.000 kilos de tomates.
Se pusieron a la venta 15.000 entradas para visitantes, ya agotadas, y se reservaron otras 5.000 gratuitas para los vecinos de Buñol.
Según dijo a Efe el concejal responsable de fiestas, Rafael Pérez, esa reducción de aforo hace que sea una “incógnita” los beneficios que generará esta fiesta y que otros años han rondado los 300.000 euros (unos 400.000 dólares).
Con el tomate como única munición, la batalla arrancará el 28 de agosto con participantes ataviados de blanco o con disfraces.
Durante los sesenta minutos que dura la contienda, cinco camiones grandes y uno pequeño recorren los cuatrocientos metros del trayecto por las calles del municipio.
Los 130.000 kilos de tomate, provenientes de una cooperativa, son 10.000 kilos más que en años previos y un récord hasta ahora.
De las 15.000 entradas vendidas, entre 8.000 y 10.000 se han vendido a través de empresas turísticos, mientras que el resto se vendieron de modo directo a través de una página web. (EFE)