Los problemas en las infraestructuras y las redes de transporte se multiplican en Europa, como consecuencia del temporal de frío y nieve que desde hace nueve días no da tregua en el continente, mientras sigue incrementándose el número de muertos, que ya superan de largo los 250.
Tan sólo en los tres países más golpeados por la ola de frío, Ucrania, Polonia y Rumania, se informó este domingo de al menos 23 nuevos fallecimientos, en su mayoría personas sin hogar, con lo que los muertos ascienden ya, respectivamente, a 131, 53 y 34, respectivamente.
Las autoridades mantienen sus respectivos dispositivos de ayuda y en los tres países se han establecido millares de centros de acogida en los que los ciudadanos pueden refugiarse del frío.
Las fuertes nevadas que azotan Europa desde el pasado 27 de enero están causando además graves contratiempos en las carreteras, en el transporte aéreo y el ferroviario, así como en el suministro energético.