Luego de que legisladores federales panistas y priistas decidieron instalar el módulo de atención a quejas de derechohabientes de la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de La Margarita, este ya ha sido retirado, durando en el inmueble únicamente 42 días en funcionamiento.
El pasado 21 de marzo, Mario Riestra Piña, Carolina Bouregard Martínez del Partido Acción Nacional (PAN) y la legisladora priista Blanca Alcalá Ruiz presentaron el Módulo de Contraloría Ciudadana para recibir quejas por el servicio del hospital.
En este acto, los opositores del gobierno obradorista comentaron que este módulo fue instalado con el único objetivo de recabar las quejas de los derechohabientes a fin de llevarlas ante Zoé Robledo Aburto, actual director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Entre las quejas más comunes presentadas por parte de los legisladores destaca la falta de medicamentos, condiciones desfavorables en las instalaciones y la saturación del inmueble, incluso un caso que más sonó de este nosocomio fue que había chinches en la cama de los pacientes.
Hasta el último corte generado el pasado 19 de abril fueron recabadas 754 quejas, siendo una de las más recurrentes, el tiempo de espera y las constantes cancelaciones en las consultas de los pacientes, falta de estudios y nula cantidad de médicos especialistas.
No obstante, y de manera repentina, luego de 42 días desde su instalación dicho módulo fue retirado de las afueras del hospital de La Margarita, como se pudo constatar en un recorrido realizado este viernes 12 de mayo por el portal E-consulta.
Comerciantes aledaños a la zona comentaron que el módulo estuvo durante varios días recibiendo quejas por parte de los usuarios del hospital, no obstante, este fue retirado desde la semana pasada.