Dicen los que saben que el líder de la Agrupación de Comerciantes y Prestadores de Servicios de Cholula A. C., Máximo Ortega Mello, anda muy preocupado y no es para menos; muchos –por no decir todos– de sus agremiados están por darle la espalda debido a que su dizque liderazgo ha generado más duda que aciertos entre los comerciantes de San Pedro Cholula.
De entrada, dicen sus más cercanos colaboradores que el hijo de Don Antonio Ortega Castillo (QEPD) no tiene representación en ese grupo, toda vez que quien realmente aparece en el acta constitutiva era su papá; pero valiéndose del apellido, “Max”, como le dicen sus cuates, está generando malestares entre los comerciantes.
Todos se hacen una sola pregunta: ¿dónde quedan los ingresos de los más de 2 mil agremiados?, o en qué se invierte, porque cada día cuesta más abrir un negocio, además de que deben pagar su “estampita” que ampara que el negocio pertenece a la organización, a lo que no han encontrado respuesta.
Pero una de las principales molestias de “Max” fue que el gobierno municipal de Paola Angon desde el año pasado agilizó la apertura rápida de empresas y con ello les quitó el negocio a los supuestos “gestores”, que lo único que hacían era cobrar lo doble y hasta el triple.
Ahora se entiende de dónde viene la molestia, ya que el líder comerciante sabe que vienen nuevos incentivos para refrendar las licencias de sus agremiados, quienes se van a ahorrar la “estampita”, las juntas y, sobre todo, el acarreo político con el que sustenta sus demandas ante cualquier nueva administración que llegue, ¿o no?
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