Armando Guerrero Ramírez pasará a la historia como el ex presidente del Instituto Electoral del Estado de Puebla que usurpó la profesión de abogado y si la justicia se aplicará en la entidad pasaría de 1 a 6 años de prisión y una multa de 100 a 300 días de salario mínimo.
El delito de usurpación de profesión está incluido en el Código Penal Federal que a la letra dice:
“CAPITULO VII – Usurpación de funciones públicas o de profesión y uso indebido de condecoraciones, uniformes, grados jerárquicos, divisas, insignias y siglas
Artículo 250. .- Se sancionará con prisión de uno a seis años y multa de cien a trescientos días a quien:
Al que, sin ser funcionario público, se atribuya ese carácter y ejerza alguna de las funciones de tal;
Al que sin tener título profesional o autorización para ejercer alguna profesión reglamentada, expedidas por autoridades u organismos legalmente capacitados para ello, conforme a las disposiciones reglamentarias del artículo 5 constitucional.
a).- Se atribuya el carácter del profesionista
b).- Realice actos propios de una actividad profesional, con excepción de lo previsto en el 3er. párrafo del artículo 26 de la Ley Reglamentaria de los artículos 4o. y 5o. Constitucionales.
c).- Ofrezca públicamente sus servicios como profesionista.
d).- Use un título o autorización para ejercer alguna actividad profesional sin tener derecho a ello.
e).- Con objeto de lucrar, se una a profesionistas legalmente autorizados con fines de ejercicio profesional o administre alguna asociación profesional”.
Hasta aquí la larga pero necesaria cita.
Armando Guerrero Ramírez, el “licenciado cachirul”, violó todas las disposiciones legales antes señaladas.
Si la justicia existiera, entonces habría un castigo ejemplar.
Pero seguramente no ocurrirá de tal forma.
Lo que sí está claro es que el Congreso del Estado de Puebla deberá replantear el trabajo de su equipo de abogados encargados de certificar que los documentos que se entregan no sean “falsos” como ocurrió con Armando Guerrero Ramírez.
Declaraciones de ex diputados locales dejaron al descubierto que Armando Guerrero entregó un supuesto título y cédula en su registro como aspirante al IEE pero hoy sabemos que eran falsas.
En otras palabras, Armando Guerrero le mintió a todos y, sobre todo, falló a su propia familia.
Desde ayer está acaba la carrera del usurpador del IEE porque nadie volverá a confiar en él.
Tal y como le ocurrió al ex tesorero de Puebla, Arturo Botello Vargas, quien firmaba como contador sin tener el título y cédula profesional.
La actual duda es cuántos licenciados cachirules más habrá en el servicio público en Puebla.
** ** **
Una vez que es inminente la llegada de Gonzalo Juárez Méndez como líder del sindicato del Ayuntamiento de Puebla en sustitución de Daniel Ortiz Acevedo, comenzó a circular un interesante escrito entre la base trabajadora que pone en alerta a los trabajadores de los verdaderos intereses del hombre de confianza del secretario de Administración, Rafael Ruiz.
Gonzalo Juárez Méndez pronto estará en el ojo del huracán.
** ** **
www.contrastesdepuebla.com
@gomezcarlos79