A partir del martes 1 de diciembre, el estado de Chihuahua avanzó al color naranja del semáforo epidemiológico, luego de más de un mes de mantenerse en rojo por un incremento de contagios de COVID-19, principalmente en la capital del estado y en Ciudad Juárez.
Luego de sesionar, el Consejo Estatal de Salud de Chihuahua, acordó cambiar al semáforo naranja restrictivo. lo que permitirá realizar algunas actividades económicas, pero manteniendo la sana distancia y medidas de higiene.
“El consejo de salud y este grupo de trabajo, que ustedes ven aquí, hemos decidido esta mañana de que hay que restringir un poco el color naranja, buscando terminar de mejorar particularmente este indicador que es el de ocupación hospitalaria, para tener un margen mayor para la apertura”, señaló Eduardo Fernández, secretario de Salud de Chihuahua.
Durante el mes de octubre, el estado de Chihuahua, sumó más de 14 mil casos positivos de COVID-19 y mil 160 fallecimientos, por lo que el Gobierno de Chihuahua decretó el cierre de todas las actividades económicas y de movilidad en los 67 municipios del estado durante dos semanas.
Esta medida ayudó a disminuir los contagios y muertes por coronavirus, por lo que esta semana la entidad se encuentra en semáforo naranja.
Con el cambio de color en el semáforo epidemiológico, los restaurantes podrán atender a comensales dentro de los establecimientos.
Se mantendrán las restricciones en la venta de alcohol con “ley seca” a partir del jueves y hasta el lunes. Cuando esté permitido solo se podrán comprar bebidas embriagantes hasta las seis de la tarde.
A pesar del nuevo semáforo naranja, siguen suspendidos los museos, teatros, centros culturales y deportivos, así como las iglesias, los cines, parques, las plazas, así como los eventos masivos cerrados y al aire libre.
Además continuarán canceladas las visitas a los centros de readaptación social, las estancias para adultos mayores y las clases en escuelas y academias.
