Jesús Lemus
Sin decir los nombres de quienes están al frente de los actuales gobiernos estatal y municipal de Puebla, los priistas llevaron a cabo el relevo de sus dirigencias, donde el más ovacionado fue el ex mandatario poblano, Mario Marín Torres.
El Complejo Cultural Universitario de la BUAP sirvió de escenario para cobijar a los principales liderazgos del priismo, quienes no desaprovecharon la oportunidad para intercambiar saludos y abrazos.
Mario Marín Torres, ocupó la primera fila como espectador al momento de las tomas de protestas de Ana Isabel Allende Cano y José Chedraui Budib al frente de las dirigencias del PRI.
Junto a Mario Marín Torres estuvieron Melquiades Morales Flores y Guillermo Jiménez, ambos ex mandatarios del estado, además del diputado local por el PVEM, Juan Carlos Natale López, y funcionarios federales, como Juan Carlos Lastiri Quirós y Juan Manuel Vega Rayet.
Sin embargo, al momento de la presentación de quienes habían desempeñado los papeles de gobernadores, fue Mario Marín Torres el más ovacionado por los tricolores que abarrotaron las instalaciones del CCU.
En una breve entrevista que concedió Marín Torres, éste señaló que serán los poblanos quienes evaluarán qué tanto beneficia su regreso a las actividades del partido en Puebla.
El oriundo de Nativitas, glosó que todo gobierno tiene sus riesgos de poder ser rechazado o aceptado y ello se medirá en las elecciones que se avecinan en 2015.
“Hay que preguntar a la gente, pero la que ha sido afectada con esas decisiones, todo gobierno tiene sus riesgos de ser aceptado o rechazado, eso se verá en las urnas el otro año”, adelantó.
Porras, globos con verde, blanco y rojo, además de bandas de guerra y música amenizaron el Auditorio del Complejo Cultural, el cual albergó a más de 4 mil priistas de diferentes regiones de Puebla para presenciar la llegada de las nuevas dirigencias.
Sin embargo, llamó la atención que bajo los puestos asumidos por Ana Isabel Allende Cano y José Chedraui Budib no se dijeran los nombres de quienes representan las administraciones estatal y local, aunque por varios minutos estuvieron lanzando críticas por algunas acciones emprendidas por las actuales autoridades emanadas del PAN, PRD, Nueva Alianza y Compromiso por Puebla.
Las inconformidades estuvieron presentes en el evento tricolor, pues varios ciudadanos que viajaron de municipios como Quecholac se quedaron sin entrar al Auditorio del CCU, pues el mismo estuvo a su máxima capacidad.
No obstante y para tranquilizar los ánimos de aquellos inconformes, se contrató una banda grupera que cantaba diversas canciones de ese género, a fin de calmar a aquellos priistas que no pudieron tomarse “la foto” y saludar a los nuevos líderes del instituto. Fue así como se concretó el relevo de las dirigencias estatal y municipal, puestos que tendrán como primera responsabilidad la selección de candidatos para 2015, abanderados que supuestamente serán elegidos por las trayectorias políticas y no por el famoso “dedazo”.