Con aplausos, globos blancos lanzados al cielo, porras y lamentos, particularmente de su madre, fue sepultado “Santi”, el niño de 12 años que perdió la vida a causa de la caída de un árbol en la calle 5 de Mayo, provocada por las fuertes lluvias en la ciudad de Puebla.
Los restos de Santi descansan en el Panteón Francés de la capital poblana, donde se observa una imagen de él, en la que aparece sonriente y con sus lentes.
La madre de Santi, Teresa Trejo, junto con su esposo, Eduardo Mozo, llegaron al panteón a despedir a su hijo, acompañados por familiares y amigos, quienes cantaron, hicieron oración y pidieron a Dios que reciba a su hijo entre sus brazos.
Se llevó a cabo un rosario, seguido de una ola de aplausos por parte de los presentes, quienes se despidieron de Santi.
El sepulcro de Santi fue decorado con flores y globos y, en particular, uno con la imagen de Spider-Man, personaje favorito del menor.
La madre de Santi, la señora Teresa, fue dada de alta tras su recuperación, por lo que se trasladó al funeral de su hijo con collarín y vendada de la cabeza, en silla de ruedas y asistida por su esposo.
La carroza blanca de Santi salió de la Funeraria Latinoamericana, de Plaza Dorada, al Panteón Francés, donde ya los esperan amigos y familiares, además de la prensa, reporteros, fotógrafos y camarógrafos.
El pequeño Santiago falleció el pasado 29 de agosto, cuando un árbol que derribaron las fuertes lluvias cayó encima del puesto de periódicos propiedad de sus padres, ubicado en la calle 5 de Mayo, quienes se encontraban dentro con él haciendo la tarea, pues había sido su primer día de clases en la secundaria.
