Aunque en este mismo espacio hemos señalado que si hoy fueran las elecciones de 2027 Morena arrasaría en 14 de las 16 entidades donde habrá comicios dentro de dos años, muchos factores influirán para determinar si este escenario favorece al oficialismo.
Un primer factor es saber si la 4T y su principal sostén, el expresidente Andrés Manuel López Obrador, saldrán bien librados de los juicios que se llevan a cabo en Estados Unidos contra las cabezas del Cartel de Sinaloa, con el cual se presume está ligado.
Los juicios contra Ovidio Guzmán (alias “El Ratón”), hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, y su principal socio, Ismael “El Mayo” Zambada, son claves para definir el futuro de la 4T, que aún “fanfarronea” sobre este tema, así como los señalamientos por lavado de dinero contra instituciones de crédito como CIBanco, Invermex y la casa de bolsa Vector. Todo apunta a que Ovidio Guzmán, ahora testigo protegido del gobierno de Estados Unidos, revelará información “bomba” sobre la relación entre el expresidente López Obrador y el cartel criminal que encabezó su padre y luego él mismo.
Cabe recordar el famoso “Culiacanazo” del 17 de octubre de 2019, cuando fuerzas federales capturaron a Ovidio Guzmán en Culiacán, Sinaloa, y, por orden presidencial directa, fue liberado. También fueron notorias las constantes visitas del tabasqueño a Badiraguato, tierra natal de “El Chapo” y su entorno, incluso para saludar a la madre del narcotraficante.
Las evidencias que aporte Ovidio durante el juicio podrían ser tan contundentes que pondrían entre la espada y la pared al gobierno de Claudia Sheinbaum, en una posición ya de por sí frágil.
Sin embargo, López Obrador no sería el único señalado por nexos con el narco. También se habla de la presunta relación de sus hijos mayores con personajes del crimen organizado, así como de connotados políticos de la 4T, incluyendo gobernadores, legisladores federales, empresarios, artistas y otros que podrían ser mencionados en los juicios más relevantes de este siglo contra el narcotráfico en Estados Unidos.
La postura que adopte la presidenta Sheinbaum ante este escenario será clave para el futuro del movimiento obradorista. Dejar que estos personajes se hundan solos podría tener severas consecuencias internas para la mandataria, pero defenderlos podría acarrearle problemas con Estados Unidos, que no está jugando.
Este tema es fundamental no solo para el futuro de Morena, sino para el del país.
Otro factor clave rumbo al 2027 tiene que ver con un asunto interno de Morena: la definición de las 16 candidaturas a las gubernaturas en juego, así como de las diputaciones federales, que, aunque parece un asunto menor, no lo es.
El tema de la no reelección, establecido en los estatutos de Morena para 2027 por su consejo nacional, representa un auténtico problema. Algunos creen que se puede resolver de manera simplista a través de los partidos satélite, como el Verde y el PT, pero no es tan fácil.
Burlarse de la voluntad de la presidenta Sheinbaum podría tener altos costos, incluso sumando a Morena en estas coaliciones, porque quedaría claro que la presidenta se doblegó ante los intereses de facciones y grupos de poder que ya predominan, como en el viejo PRI, dentro del oficialismo.
La prueba de esto la veremos en la definición de la candidatura del oficialismo para la gubernatura de Zacatecas, entidad gobernada por David Monreal, cuyo hermano Saúl busca sucederlo, en un claro caso de nepotismo.
Saúl Monreal, actualmente militante de Morena y hermano del coordinador de los diputados federales de este partido, quiere suceder a su hermano David en el cargo. Sin embargo, como el “partidazo” ya aprobó que no puede haber nepotismo, Saúl ha anunciado que podría postularse por otro partido, y aquí está lo realmente interesante.
Muchos afirman que Saúl Monreal será postulado por el Verde, lo que supuestamente anularía el nepotismo, sumando al PT y a Morena en una coalición o alianza. Sin embargo, los más avezados sostienen que no será así, y que Saúl podría ser candidato por Movimiento Ciudadano, partido con el que su hermano Ricardo mantiene una estrecha relación a través de Dante Delgado.
Movimiento Ciudadano, que está cerca de convertirse en la segunda fuerza electoral del país, podría ser el trampolín para muchos inconformes de Morena, comenzando a debilitar parcialmente al oficialismo. Después de todo, desde 2024 ha quedado claro que el partido naranja tiene acuerdos con las altas jerarquías de Morena, que prefieren a Movimiento Ciudadano antes que al PAN o al PRI como oposición.