Hasta el momento, la transición entre la administración saliente y la entrante ha sido de “terciopelo”.
El gobernador entrante, Alejandro Armenta, le ha otorgado al mandatario saliente, Sergio Salomón Céspedes, un trato como pocas veces se había visto, respetando en todos los aspectos su investidura; incluso, cediéndole espacios, algo pocas veces visto en las transiciones del poder en Puebla.
Sin embargo, en el panorama se ha cruzado un tema sumamente espinoso y que pudiera convertirse en un problema entre la administración entrante y la saliente, las presiones de los transportistas, para que se incremente el costo de la tarifa del servicio que brindan los permisionarios.
Tanto el gobernador Céspedes como el mandatario entrante, Alejandro Armenta, han sido enfáticos en el sentido de que no habrá incremento a la tarifa del transporte público, pero la presión por parte de los permisionarios ha ido en aumento de tal forma, que Armenta ya reconoció que podría venir un ajuste.
Existen compromisos adquiridos con los transportistas, quienes han sido pieza clave en el tema de las movilizaciones realizadas desde hace casi tres años a favor de la candidata de Morena a la Presidencia de la República, desde que Barbosa aún vivía, pasando también por el apoyo brindado en el pasado proceso electoral a favor del oficialismo.
Y el apoyo no solo pasa por haber prestado sus unidades para la movilización (acarreo), hay permisionarios que aseguran de que además de contribuir con el ya tradicional “moche” para operar sus rutas para el secretario Álvarez Arronte, también hubo recursos adicionales para la campaña y también ahora en la etapa de la transición.
De hecho, aseguran que la promesa de por medio para participar en apoyo a los candidatos de Morena fue el hecho de que, una vez que se obtuviera el triunfo, vendría también de la mano el incremento a la tarifa de su servicio.
El tema es, pues, una verdadera “bomba de tiempo”, la cual han venido dilatando las diferentes administraciones morenistas y sus respectivos titulares, quienes le buscan heredar el problema a Alejandro Armenta y a quien será la nueva titular de esta área, la exdiputada priista Silvia Tanús, quien está recién desempacada de un viaje al extranjero, para realizarse un chequeo médico.
Tradicionalmente y de común acuerdo, la administración saliente suele ser la que absorbe el costo político de aprobar el incremento a la tarifa del transporte público, para que la nueva que está por entrar en funciones no se vea afectada en su “bono democrático”, es decir los “villanos son los que ya se van”.
Vamos a ver si el gobernador Sergio Salomón Céspedes está dispuesto a absorber el costo de esta medida, a todas luces impopular, sobre todo por el pésimo servicio que se brinda en Puebla y el mal estado en el que se encuentran la mayor parte de las unidades que circulan en el territorio poblano.
Cabe señalar que el tema, reitero, no es un asunto menor, tan no lo es que detonó el distanciamiento entre el entonces gobernador, Tony Gali, y el exmandatario Rafael Moreno Valle, quien a unos cuantos días del inicio de la administración de su esposa, Martha Erika Alonso, le exigió a Gali aprobar el incremento a la tarifa del transporte público, cosa a la cual el entonces mandatario se negó, lo que fracturó la relación entre ambos personajes.
Vamos a ver qué pasa en este tema entre Sergio Salomón Céspedes y Alejandro Armenta; mientras tanto, la presión por parte de los transportistas amenaza con ir en aumento.
Reitero, ojo con el Verde
Desde hace tiempo en este espacio lo hemos venido comentando, ojo en el Verde, este partido va a tomar mucha fuerza, todavía más de la que ganó en el pasado proceso electoral.
La foto de la toma de posesión de la presidenta de nuestro país tiene muchas interpretaciones y de ninguna manera es un descuido o una omisión por parte de Sheinbaum.
Sin duda, es un mensaje fundamental del papel que Manuel “El Güero” Velasco ha jugado al lado de la ya presidenta y también de la fuerza que tendrá en la nueva administración que recién comenzó.
Ya abundaremos en el tema.
Abdala, otra vez delegado
Rodrigo Abdala Dartigues, quien fue mencionado para ocupar la Secretaría del Bienestar en la administración municipal de José Chedraui, prefirió regresar a la delegación de esta dependencia en Puebla, en vez de entrar en conflicto.
Abdala había sido destapado para ocupar esta área en la administración municipal por el gobernador, Alejandro Armenta, pero durante la presentación del equipo de José Chedraui, en vez de aparecer su nombre se dio a conocer que sería Carlos Gómez Tepox quien ocuparía esa posición dentro del organigrama del Ayuntamiento.
Cabe señalar que Gómez Tepox también es posición del gobernador Armenta, quien lo tiene en buena estima y, sobre todo, del diputado local y futuro jefe de la oficina del gobernador, José Luis García Parra. ¿Qué sucedió?
Que Abdala prefirió no entrar en conflicto con ninguno de los dos grupos y optó mejor por mantenerse neutral, regresando a su cómoda posición como delegado. Es cuanto.
Godina, nombramiento de lujo
Quien sin duda se ganó su lugar dentro del gabinete ampliado del gobernador Alejandro Armenta es, sin duda, Luis Antonio Godina Herrera, quien ocupará la Dirección del ISSSTEP en Puebla, ente que representa un verdadero “foco rojo “para la administración estatal y futuras gestiones.
Godina es un destacado economista, quien, reitero, por méritos propios y por nadie más, obtuvo esta posición al lado del nuevo gobernador de Puebla.
El ISSSTEP atraviesa por una profunda crisis a causa, principalmente, del sistema de pensiones, mismas que cada día crecen más, mientras que los ingresos para poder pagarlas se reducen. Se necesitaba un personaje del tamaño y los alcances de Godina para resolver el problema.
