Uno de los primeros dirigentes partidistas que podría caer en cuanto termine el actual proceso electoral es Emilio Salgado Néstor, el presidente estatal del Partido Nueva Alianza (Panal), quien lleva 7 años en el cargo y está en la mira de los dirigentes locales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) que lo han señalado de convertir a esta fuerza política en su negocio privado y ponerlo en riesgo de desaparecer.
Se dice que ya se solicitó formalmente una investigación contra Salgado Néstor por la sospecha de que en el Panal se habrían vendido varias candidaturas a alcaldes, mismas que se habrían ofrecido –a los interesados— bajo la idea de que, al pactarse una alianza con Morena en la actual contienda, había muchas posibilidades de triunfo para los aspirantes de Nueva Alianza.
Más allá de que se pueda o no probar esos posibles actos de corrupción, en el magisterio existe mucho malestar porque el Panal, un partido que surgió en las entrañas del SNTE –cuando Elba Esther Gordillo Morales era la cacique del gremio de educadores–, es una fuerza política ajena al gremio de los maestros y lo que es peor, postuló a pésimos candidatos a ediles y diputados locales, lo que podrían empujar a Nueva Alianza a perder todo en la contienda que está transcurriendo.
El Panal tiene medio cuerpo adentro del terreno de la extinción, ya que perdió el registro político nacional y conserva solamente el registro local gracias a que, en los comicios de 2021, se dio el sorpresivo triunfo del expriista Rogelio López Angulo en la alcaldía de Huauchinango.
Dicho resultado de López Angulo –de hace tres años– acabó siendo un tanque de oxígeno para esta fuerza política que, de “panzaso”, alcanzó el 3.95 por ciento del total de sufragios a nivel estatal, lo que significó quedar por pocas centésimas arriba de la marca mínima de votos que se necesita para seguir compitiendo en el estado de Puebla.
Lejos de que Emilio Salgado Néstor en esta ocasión buscara candidatos competitivos y atractivos para evitar el mal resultado obtenido hace un trienio, que por poco le cuesta el registro político local al Panal, al final únicamente se preocupó por sus intereses personales.
Una prueba de lo anterior es que en el primer lugar de la lista de candidatos del Panal a diputados locales por la vía plurinominal aparece María de Jesús Yolanda Tapia Cielo, quien tiene la particularidad de ser la cuñada de Emilio Salgado Néstor y una mujer que carece de liderazgo dentro del magisterio poblano.
Antes de que Yolanda Tapia fuera postulada como aspirante a legisladora, se desempeñó como la segunda de a bordo en la dirigencia estatal del Panal. Una etapa en la que poco o nada se informó del destino de las prerrogativas que ha recibido el partido en los últimos 7 años.
Hay otros ejemplos emblemáticos de malos aspirantes a cargos de elección popular. Están los casos de Irineo Peña Urbano e Israel Ibarra Hernández, quienes son los aspirantes del Panal a ediles de San Martín Texmelucan y Atlixco, respectivamente.
Se supone que en ambas plazas había posibilidades de que Nueva Alianza pudiera dar la competencia, por tener importantes estructuras electorales surgidas desde el magisterio, pero se acabó nominado a personajes grises que no generan ningún impacto en el electorado y mucho menos, entre el gremio de maestros.
El mayor escándalo se vivió en San Martín Texmelucan, a tres días de haber arrancado las campañas, cuando en un acto público y grabado, el ex edil de este municipio y poderoso empresario que es dueño de la fábrica de porcelana Santa Julia, Noé Peñaloza Hernández, se jactó que él fue quien directamente puso al candidato Irineo Peña.
Y por si fuera poco, Peñaloza –quien vestía todo de azul— al hablar ante el micrófono del acto sacó de la bolsa derecha de su pantalón un enorme fajo de billetes, del cual dijo que era para que “no faltara nada” en la campaña electoral del candidato Irineo Peña, quien se comportó como si fuera un empleado del empresario y entonces, con movimientos tímidos, pasó a recoger el dinero que el ex alcalde agitaba con orgullo en una de sus manos.
Aunque Emilio Salgado –horas más tarde—dio a conocer que, a nombre del Panal, le había devuelto el dinero a Noé Peñaloza, quedó la impresión de que el empresario daba a entender que él habría “comprado” la candidatura a favor de Peña Urbano. Por lo menos es lo que se comentó entre varios de los asistentes al evento en que se inauguró la casa de campaña del aspirante a edil.
El SNTE 51 en contra de Salgado
Uno de los dirigentes magisteriales que está inconforme con el desempeño de Emilio Salgado Néstor es Alfredo Gómez Palacios, el secretario general de la sección 51 del SNTE, que es la facción que agrupa a los maestros estatales.
De las dos secciones que tiene el SNTE en el estado, se sabe que el año pasado le correspondía al SNTE 51 proponer a un nuevo dirigente para el Panal.
Por esa razón había el proyecto de –la sección encabezada por Alfredo Gómez Palacios— de nombrar a un nuevo Comité Ejecutivo del partido que estuviera formado por líderes magisteriales, que pudieran motivar la participación del gremio de maestros, que es el más grande en el estado al tener más de 80 mil afiliados.
Lo idea original era que el Panal compitiera sin hacer alianzas y buscando recuperar los votos de las bases del SNTE, de los docentes, que siempre han sido en su conjunto una poderosa maquinaria electoral.
Eso planes se vieron frustrados porque Néstor Salgado fue hasta la cúpula nacional del SNTE y del Panal a hacer dos peticiones: que lo dejaran un periodo más y que se hiciera una alianza con Morena.
Al final se le concedieron ambas solicitudes. La única condición que se le puso es que trabajara cerca del sindicato de trabajadores de la educación y se buscara sacar, por lo menos, un 5 por ciento de la votación estatal.
Cuando falta mes y medio para los comicios, el diagnóstico es: el proyecto electoral del Panal está alejado del interés de los maestros; no hay buenos candidatos a alcaldes y diputados; y las encuestas, indican que al partido no roza ni el 2 por ciento de la intención del voto.
Si eso ocurre, el Panal entrará a la fase de extinción.