La pasada visita del dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, a Puebla comenzó a despejar dudas en torno a quiénes serán la dupla a la gubernatura y a la Presidencia Municipal de Puebla.
El michoacano ya no dejó lugar a dudas sobre en donde se encuentran sus preferencias. Cortés ratificó que el candidato a la gubernatura será el edil capitalino, Eduardo Rivera Pérez, mientras que, rumbo a la alcaldía, ya cobijó mediante una comida privada a su “pollo”, el diputado federal Mario Riestra Piña.
Las formas de Cortés tal vez no les hayan gustado a algunos integrantes de este partido, como la senadora Nadia Navarro, quien se retiró molesta de la inauguración del nuevo edificio que albergará a la dirigencia estatal del albiazul, sin embargo, aclaran el panorama al interior de este instituto político, quien busca a toda costa evitar una fractura que pudiera poner en riesgo sus posibilidades de poder competir contra Morena el próximo año.
Ahora lo único que falta es ponerse de acuerdo con sus aliados del PRI y el PRD en la forma en que se podrán repartir posiciones dentro de un posible gobierno con Eduardo Rivera y de las regidurías, dentro de la planilla que acompañará a Mario Riestra en el 2024.
La dupla Rivera-Riestra, sin duda es la que mejores resultados le puede dar al albiazul para el próximo año.
Se trata simplemente de los dos personajes mejor posicionados en las preferencias electorales, uno para tratar de recuperar la gubernatura para el PAN y el otro para tratar de mantener bajo mandato del albiazul la ciudad capital, la cuarta más importante del país.
Cabe señalar que, para el panismo poblano y para el Frente integrado por este partido, más el PRI y el PRD no hay margen de error en la selección de sus candidatos, al tratarse de una elección concurrente con la federal, en donde también se escoge candidato a la Presidencia de la República, al senado y las diputaciones federales.
El Frente debe de ir con sus mejores perfiles para tratar de ganar la gubernatura y retener la alcaldía, de lo contrario, corren el riesgo de ser arrasados por la “marea” morenista, partido que va por todo, abrigado por su candidata presidencial, Claudia Sheinbaum.
Para Eduardo Rivera, es vital que tenga como compañero en la capital a un personaje que le pueda dar, al menos, 370 mil votos y evitar que Morena avasalle al PAN en la capital, para que él pueda competir en el interior del estado contra la estructura morenista y ese personaje es Mario Riestra, quien es conocido en la capital y además cuenta con un buen posicionamiento.
Otra parte de este engranaje deberán de ser las propuestas del Frente y del albiazul en la capital, tanto para las diputaciones federales, como para las locales.
Marko Cortés no se equivocó, Eduardo y Mario son las mejores cartas del albiazul y las dos más competitivas.
Anote a Jorge Aguilar como candidato a diputado federal
Y hablando de que el PAN va con sus mejores hombres y mujeres, el que está listo para contender por una diputación federal por Puebla capital, es el exsecretario de Salud y exlíder del Congreso local, Jorge Aguilar Chedraui.
Jorge siempre generoso no quiere ir por la vía plurinominal, sino que está dispuesto a ir a la contienda de forma abierta y se dice que podría ser por el distrito 12 con cabecera en Puebla, el cual actualmente está representado por Mario Riestra.
Jorge es de los pocos morenovallistas que se han mantenido leales a Acción Nacional y además tiene una excelente relación con el dirigente nacional de este partido, su amigo Marko Cortés.
Jorge es garantía para el panismo y sin duda en caso de concretarse su postulación, reforzaría de maravilla al “team” conformado por Eduardo Rivera y Mario Riestra.
Liliana Ortiz y su informe de labores
Otro enorme activo que tiene el panismo poblano es, sin duda, Liliana Ortiz, la esposa del actual edil capitalino, Eduardo Rivera Pérez.
Lili rinde su segundo informe de labores y es, sin duda, un personaje que ha dejado su sello en materia de asistencia social en favor de los niños, los adultos mayores y, en general, a favor de los menos favorecidos.
Politóloga de profesión, al igual que Eduardo Rivera, Ortiz ha acompañado siempre a su esposo en su actividad política, sin embargo, ella misma es ahora uno de los principales activos que tiene el albiazul y, asimismo, ha sido medida e incluso contemplada.
Será muy importante escuchar su informe de actividades y estar muy pendiente de quien se dice, podría participar de manera activa en el 2024.
No hay que perderla de vista.
