Las encuestas que ya comienzan a medir a todos los suspirantes para las nueve gubernaturas que se renovarán en 2024 dejan ver que si Morena desea retener la Ciudad de México deberá apostar por quienes están mejor posicionados: Omar García Harfuch y Martí Batres Guadarrama.
Esta posición sumada a los pleitos entre los primos Mier, que podrían ocasionar una fractura interna y otros factores como las acciones afirmativas, obligarán al partido de Andrés Manuel López Obrador a tener que colocar a una mujer como candidata al gobierno de Puebla.
Vayamos por partes. La ley indica que Morena sólo podrá designar a cuatro candidatos hombres, en las nueve gubernaturas que se disputarán el próximo año.
Morena priorizará a sus militantes “puros” y de ahí que sea fácil deducir que de los cuatro espacios que tienen, uno será para Zoé Robledo, director general del IMSS y hombre cercanísimo al presidente López Obrador. Él va por Chiapas.
En Morelos, otro incondicional de la burbuja lopezobradorista, Rabindranath Salazar, tiene más que cantada la candidatura. Ahí ya se estarían utilizando dos de los cuatro espacios que Morena puede reservar para hombres.
La Ciudad de México, como lo dije al inicio, es la joya de la corona y un pilar para la elección presidencial. Retenerla, frente a una oposición que ya tiene el control de la mitad de las alcaldías, será complicado y deberán colocar a un personaje puntero en las encuestas. En estos momentos esos son: Omar García Harfuch y Martí Batres Guadarrama. Van tres.
En Tabasco, Yucatán y Jalisco, los mejor posicionados también son hombres. Sin duda, para Andrés Manuel la posibilidad de arrebatarle la perla tapatía a Movimiento Ciudadano, es bastante tentadora. Serían los cuatro.
De ahí que en Puebla, Guanajuato y Veracruz se pueda prever que las posibilidades de que el inquilino de Palacio Nacional designe a una candidata mujer, son muchas.
Y ¿cuáles serían las posibles corcholatas locales? Evidentemente la mejor posicionada en este momento es Olivia Salomón. Otra posibilidad es la de Beatriz Gutiérrez, la no-primera dama. La secretaria federal del Medio Ambiente, María Luisa Albores, entraría a la lista. Claudia Rivera Vivanco, por sus relaciones nacionales también podría regresar a las boletas electorales en Puebla.
Así que no se deben llamar sorprendidos todos esos que hoy apuestan sus nombres en bardas, espectaculares y revistas para tratar de ganar popularidad si un día les llaman desde Palacio Nacional diciéndoles que “la ley es la ley” y que una mujer será quien compita para tratar de mantener la gubernatura en Puebla.
