Contracara por Enrique Núñez
La publicación que hice en mi entrega de ayer generó innumerables comentarios, respecto al absurdo protagonismo del Señor de los Cerros, el cual lo llevó a presentarse al desfile mexicano de la independencia en Nueva York, pese a no haber sido invitado por el comité organizador.
La información de ayer, no pasaba de ser un reflejo de la egocéntrica personalidad del gobernador poblano, quien aprovechó su amistad con la cónsul de México en Nueva York, para colarse a un desfile al que no estaba convocado.
Sin embargo, una foto del presidente del Partido Nueva Alianza, Gerardo Islas, en donde se le descubre como el fotógrafo personal del gobernador provocó que en su cuenta de Twitter, @gerislas, saliera en su propia defensa para explicar: El problema para Gerardo es que en su intento de defensa abrió el camino para descubrir una serie de datos que reflejan el nivel de lujos con los que el gobernador viajó a Nueva York.
Y es que en su cuenta de Instagram, Gerardo Islas publicó entre jueves y viernes sendas fotografías que dejan al descubierto el medio de transporte y el hotel en el que se hospedó la comitiva morenovallista.
La revelación de un seguidor de Twitter Juan B García Casas (@jbgarciacasas) nos mostró el camino para seguir la hebra del lujoso viaje. Veamos.
Resulta que el líder de Nueva Alianza, el jueves en su cuenta de Instagram, subió una foto en donde se aprecia en la cabina de un jet privado, en el cual presumiblemente viajaron a Nueva York.
Si consideramos que la hora de vuelo en un jet privado alcanza los 3 mil 500 dólares y que entre la ida y la vuelta suman 10 horas por aire llevamos 35 mil dólares, más la pernocta de los pilotos 5 mil, el chiste nos costó cuando menos 40 mil dólares. Es decir; 680 mil pesos.
Pero la liga de Islas como uno de los compañeros de viaje, descubre que se hospedaron en el Mandarin Oriental NY, el cual -de acuerdo a la aplicación para renta de hoteles Booking-, cuesta de 27 mil pesos la noche en habitación doble, hasta 68 mil pesos la suite con vista a Central Park, similar a la panorámica que muestra en su cuenta de Instagram Gerardo Islas.
Si tomamos como base que Moreno Valle anunció que se fueron el jueves y regresaron el domingo; y que difícilmente se quedó en una habitación normal, haga usted sus cuentas por cuando menos dos suites por tres noches de estancia, llevamos cuando menos 400 mil pesos más. Y de comidas, fiestas y compras ya mejor ni hablamos.
La verdadera historia del colado en el desfile.
Para quienes aún tienen dudas de la forma en la que se coló el gobernador a un desfile ajeno, les contaré que la señora Patricia Hernández, fundadora y organizadora de esta parada, para la cual este año se sumaron 26 grupos de migrantes, los cuales participaron como cada año.
Por simple cortesía, la señora Hernández envió una invitación a la cónsul Sandra Fuentes para la cena del viernes, en donde se entregarían las bandas a los mariscales y a los invitados especiales.
Como ya es su costumbre, la cónsul no asistió a la cena y mandó a su representante Gerardo Izzo para que recogiera sus bandas. En ese momento este personaje le informó que el gobernador de Puebla participaría en el desfile, como parte del contingente del consulado, por ser amigo personal de la cónsul Sandra Fuentes.
Doña Patricia fue puntual cuando les explicó que si quería desfilar Moreno Valle con el contingente del consulado era su decisión, pero que no podía aparecer en el grupo de vanguardia, por no estar invitado.
Por cierto, ayer recibí un correo que contiene una carta invitación para el delegado de Sagarpa, Alberto Jiménez Merino, quien era el verdadero invitado de doña Patricia, pero quien declinó por causas de trabajo.
Sin embargo, minutos antes de iniciar el desfile, la cónsul arribó al lugar de inicio del desfile acompañada de Moreno Valle, y se colocaron en la primera fila, en lugar de colocarse en el séptimo contingente que correspondió al grupo del consulado.
Así fue como el gobernador se sumó a un evento sin estar invitado.
Bien dicen que el gandalla no batalla.
La graciosa huida de Passaic.
Y para entender mejor la decisión del gobernador de irrumpir en el desfile en NY es importante decir que un grupo de activistas solidarios con los pobladores de Chalchihuapan, quienes ya habían corrido de un parque a Martha Érika Alonso hace unos meses, esperaban al gobernador en el desfile de Passaic NY, el cual se celebra el mismo día y hora que el de Manhattan.
Al parecer, alguien avisó a Moreno Valle que los manifestantes lo esperaban en el otro desfile, lo que lo obligó a salir disparado al otro evento, sin importarle su calidad de colado.
En el pecado llevó la penitencia.
Las fotografías lo dicen todo.
