Anhuar Fernández Redondo, nombrado ayer titular de la Policía Estatal Preventiva en Puebla por el secretario de Seguridad Pública Estatal, Jesús Rodríguez Almeida, fue señalado proteger a mandos medios que extorsionaban a narcomenudistas de Iztapalapa mientras fungió como titular de Investigación Policial Preventiva en el Distrito Federal.
Según publicó el diario La Crónica el 2 de agosto de 2013, a través de un video en YouTube, una narcomenudista de la delegación Iztapalapa denunció extorsiones por parte de mandos medios de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF) que supuestamente eran enviados por Anhuar Fernández Redondo, en ese entonces director general de Investigación Policial Preventiva, Planes y Organización Táctica, cuando Rodríguez Almeida fungía como titular de la Secretaría de Seguridad Pública en el Distrito Federal.
En el video que aún circula por internet, una mujer con la cara cubierta acepta ser narcomenudista y asegura que el oficial Luis Edgar López Hernández, conocido como “El Comandante Flaco”, adscrito al Estado Mayor de la SSPDF, cobra hasta mil pesos diarios por cada tienda que se ubica en San Miguel Teotongo. Además explica que en la zona hay más de 20 puntos de venta de estupefacientes.
La mujer recalca que “El Comandante Flaco” recibió apoyo en ese entonces de Anhuar Fernández Redondo, funcionario recién nombrado por Jesús Rodríguez Almeida como director de la Policía Estatal Directiva el sábado pasado.
“…Que pertenecen a la dirección general de narcomenudeo y los responsables de estas extorsiones son el Comandante Flaco, con nombre Luis Edgar López Hernández, que lo identificamos porque siempre que nos viene a cobrar anda vestido todo de blanco y nos dice que él cuenta con el apoyo del director general del narcomenudeo, Anuar Fernández Redondo”, explica esta persona en el video.
La reestructuración
En la primera entrevista concedida a medios de comunicación en Puebla, el secretario de Seguridad Pública, Jesús Rodríguez Almeida aseguró que llevaría a cabo un análisis de los perfiles que detentaban los puestos dentro de la dependencia para iniciar una limpia luego de los escándalos de corrupción que envolvieron la administración de Facundo Rosas Rosas.
En una primera tanda de cambios, llegó Luis Eduardo Vega Cambero como nuevo titular de la Subsecretaría de Coordinación y Operación Policial, quien también fue acusado por el delito de extorsión de un empresario constructor en septiembre del 2012 e incluso fue a prisión para ser liberado en febrero del 2013.
Ahora, en una segunda serie de nuevos funcionarios se anunció la llegada de Anhuar Fernández Redondo como director general de la Policía Estatal Preventiva, a quien defendió ante los medios de comunicación tras la publicación del video en 2013.
Un día después de publicado el video, el día 3 de agosto del 2013, diversos medios de comunicación publicaron que Rodríguez Almeida anunció una investigación entre mandos medios luego de la denuncia en video, sin embargo, en el caso de Fernández Redondo, aseguró que se buscaba desacreditar a los funcionarios bajo su cargo.
En ese entonces Rodríguez Almeida consideró que también se debía aclarar si esos señalamientos fueron una forma o mecanismo para desacreditar la tarea que realizan los agentes encargados del combate al narcomenudeo. Aunque nunca se dio a conocer el avance de dicha investigación ni cómo fue exonerado el propio Fernández Redondo.
Mientras tanto, el sábado pasado la Secretaría de Seguridad Pública en Puebla presentó entre los antecedentes de Fernández Redondo como licenciado en Derecho con Maestría en Derecho Penal además de que “su responsabilidad más reciente fue como director de área en el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) de la Secretaría de Gobernación Federal”.
Fernández Redondo llega a sustituir en la Policía Estatal al mayor Alfonso Sánchez Montiel, quien a su vez había sido designado tras la detención del entonces director, Marco Antonio Estrada López, quien fue detenido por el Ejército Mexicano y la PGR y actualmente enfrenta en prisión los cargos por formar parte de una red de mandos medios evidenciados por encubrir una banda de robo de combustible y ordeña de ductos de Petróleos Mexicanos.

