Mario Alberto Mejía / La Quintacolumna
Varios poblanos jugaron en la cancha nacional en su calidad de delegados del CEN del PRI.
Otros más lo hicieron como asesores de candidatos y encuestadores.
¿Nombres?
Melquiades Morales Flores, Rocío García Olmedo, Enrique Doger Guerrero, Víctor Díaz Palacios, Javier Sánchez Galicia y Elías Aguilar son algunos de ellos.
Don Melquiades llegó a San Luis Potosí a enfrentar un escenario difícil, una vez que el PAN se perfilaba para gobernar el estado del célebre y mítico Gonzalo N. Santos: el cacique que dijo una de las frases más notables de la picaresca política nacional: “La moral es un árbol que da moras”.
Pese a que la siguiente gubernatura está metida en la báscula electoral, pues el PAN se niega a aceptar los resultados obtenidos por el priista Juan Manuel Carreras, la coalición PRI-Verde se llevó 4 diputaciones federales contra 2 del PRD-PT y una del PAN.
Hay que sumarle además un buen número de diputaciones legales y ayuntamientos.
No es la primera vez que el ex gobernador de Puebla gana elecciones como delegado.
Lo hizo antes en Michoacán e Hidalgo.
En 2013 recuperó la ciudad de Oaxaca para el PRI.
Hoy sus resultados vuelven a ser óptimos.
Y es que, de entrada, Sonia Mendoza, del PAN, era la gran favorita en las encuestas.
Desde que llegó a San Luis, don Melquiades contribuyó a generar un vuelco en las expectativas.
La diputada federal Rocío García Olmedo estuvo primero como delegada en Tlaxcala y creó las bases para lo que se vio el domingo: un triunfo total del PRI-Verde en los tres distritos federales.
Ahora como delegada en Yucatán ganó los cinco distritos federales en juego.
Víctor Díaz Palacios, también diputado federal del PRI, fue enviado a uno de los siete círculos del infierno nacional —Tlaxcala— y ganó siete de las siete diputaciones.
Mal y de malas, Enrique Doger fue víctima del efecto “Cuauhtémoc Blanco” en Cuernavaca, Morelos, y sólo ganó una diputación federal.
Las cuatro restantes se las quedaron PRD-PT (2), PAN y Nueva Alianza.
Algunos de los municipios más pobres se le quedaron al PRI.
Javier Sánchez Galicia, consultor en comunicación política, tuvo a su cargo una de las tareas más difíciles: llevar el mensaje de las cuarenta y un campañas electorales de los candidatos del PRI-Verde a la Asamblea Legislativa, así como de los aspirantes a las delegaciones del Distrito Federal.
Si hay una tierra inhóspita para cualquier consultor ajeno a Morena o al PRD esa es la capital de la República Mexicana.
Con todo en contra, Sánchez Galicia logró generar una comunicación política atractiva recurriendo a la semántica y la semiótica de las redes sociales.
Los hashtags “#sumamossoluciones” y “#sumamospropuestas” hicieron lo suyo en la ciudad más grande del mundo.
Se dice fácil.
No lo fue.
Y es que desde que hay elecciones en el Distrito Federal el PRI siempre ha tenido resultados magros.
Hoy, sin embargo, Javier contribuyó a ganar tres delegaciones, algo que el PRI no había logrado nunca.
Y más: se echó en la bolsa varias posiciones de la Asamblea.
Finalmente, Elías Aguilar, del despacho Indicadores, realizó un intenso trabajo de encuestas y trackings diarios en el estado de Jalisco.
Como en todas las historias, hay ganadores y perdedores.
No más.
No menos.