Efekto 10
Ricardo Morales / Serpientes y Escaleras
Algunos personajes merecen una mención especial por el trabajo que realizan en esta elección federal, el cual les puede redituar en mejores posiciones en un futuro.
Es el caso del candidato a diputado federal por el distrito 1 con cabecera en Huauchinango, Carlos Barragán Amador (“El Gallo”), quien luego de perder en la contienda a diputado local en 2013 volvió por sus fueros y ahora encabeza las preferencias en el distrito 1, aunque nada se puede dar por sentado.
En el distrito 2 con cabecera en Zacatlán, el viejo cacique Lorenzo Rivera Sosa (“Lencho”) se ve favorecido por el “jalón de orejas” que recibieron el líder de la CNOP, José Luis Márquez Martínez, y el subsecretario de la Sedesol Juan Carlos Lastiri Quirós, a quienes conminaron a que trabajen juntos para hacer ganar a Rivera.
En contraparte, a quien —al parecer— van a jubilar de la política es a Óscar Aguilar González, eterno aspirante a todos los puestos de elección popular.
Óscar, que ha sido dos veces diputado federal por esta región, al parecer ahora sí será derrotado por los Alejo, que ya se enraizaron en la zona de Zacapoaxtla.
En el distrito 5 Angélica Salazar busca echarle la culpa al exdiputado local del PRI Edgar Salomón del fracaso en el cual se ha vuelto su campaña, pero lo cierto es que ella ha dejado mucho que desear, además de que arrastra un lastre en la figura de su consorte, el cual no le ayuda en nada.
En los distritos de la capital (6, 9, 11 y 12) sorprendentemente el PRI está dando la pelea, pero esto se debe principalmente al flojo trabajo que han hecho algunos candidatos del PAN.
Quienes sobresalen por su actividad son Graciela Palomares (“Grace”) candidata por el distrito 11, quien salió de último momento como propuesta del Verde y ha resultado una agradable sorpresa.
Otro que ha resultado competitivo es Víctor Manuel Giorgana Jiménez, que en 2013 se convirtió en el único candidato del PRI en ganar en la capital, con lo que igualó a Javier López Zavala, quien en 2001 también fue el único priista en ganar una elección en la capital, cuando todos sus correligionarios perdieron; aunque Giorgana lo hizo siendo oposición y Zavala con gobernador y presidente municipal priistas.
Giorgana, si gana esta elección en el distrito 12, lo cual no es nada fácil, se podría convertir en automático —para 2018— en el candidato del tricolor a la presidencia municipal de Puebla, y con todos los méritos.
En el distrito 7 de Tepeaca se encuentra el mejor elemento con el que cuenta el PRI en este momento: Alejandro Armenta Mier, quien ha hecho todo lo que tenía que hacer para tratar de alzarse con el triunfo en una demarcación en donde las cosas no son nada fáciles.
El gobernador ha tomado el tema como algo personal y ha dispuesto que todos los recursos se vayan para apoyar a su candidato, el panista Mario Rincón.
El mandatario estatal está consciente de que si Armenta gana se convertirá en un adversario muy peligroso en vísperas del 2016, año en que habrá de renovarse la gubernatura, y el hombre nacido en Acatzingo es quien encabeza las preferencias por el tricolor en caso de ganar.
Geraldine González es otra que ha destacado en su actuación como candidata a diputada federal por el distrito 15, con cabecera en Tehuacán; lamentablemente para la exlegisladora local por el Verde, el distrito lo pulverizaron, y la presidenta municipal y su consorte, Álvaro Alatriste Hidalgo, en vez de trabajar a su favor le hacen el trabajo sucio al candidato del PAN.
De esa forma, Geraldine tiene pocas posibilidades de ganar pero ha hecho una campaña bastante digna, la cual le puede redituar para mejores posiciones en un futuro.