Reelecta Elba Esther Gordillo Morales como presidenta del CEN del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), vendrá en Puebla una nueva etapa en la relación con el gobierno del estado.
Contra todo lo que se pueda suponer por la relación política y personal entre Elba y el mandatario poblano Rafael Moreno Valle, el trato con los dirigentes de las secciones 51 y 23 se renovarán en otras condiciones.
Destaca el caso particular de la sección 23 que afilia a la mayor cantidad de trabajadores de la educación: 48 mil activos y 10 mil jubilados.
Con el respaldo de un comité ejecutivo seccional donde predomina la corriente que lo respalda, Emilio Salgado Néstor, ha emprendido una nueva relación con el gobierno del estado.
Para empezar, Salgado debió superar la pequeña aduana relacionada con el trato personal con Moreno Valle porque era Hugo Alejo Domínguez y no Salgado Néstor, el candidato del gobernador.
Por las circunstancias de la elección en el congreso de la sección 23, donde todos los grupos se jugaron en la votación libre y secreta a el todo o nada, el actual dirigente se impuso y ha establecido nuevas condiciones.
En primer término, refrendan con Moreno Valle el acuerdo para la calidad de la educación; reinstalar a los 40 directores de escuelas excluidos por negarse a aplicar la prueba ENLACE; garantizar los acuerdos de carrera magisterial, la capacitación y las prestaciones sociales.
La relación con el gobierno estatal será tersa, pero no exenta de negociaciones que trascienden el ámbito de las relaciones laborales.
Los maestros, por lo menos en las tareas político electorales, se han propuesto reconquistar la dirección estatal del Partido Nueva Alianza y fijar metas muy precisas en las elecciones intermedias locales del 2013 y federales del 2015 donde no están dispuestos ceder candidaturas.

