Un trayecto de poco más de cien años que dará cuenta de la producción de la cerveza en México es el que trazará el nuevo museo a cargo de Grupo Modelo, que sustituirá al Museo Modelo de Ciencias e Industria (MUMCI), en Toluca, Estado de México.
La empresa cervecera anunció la semana pasada el cierre definitivo del MUMCI para iniciar los trabajos de remodelación y acondicionamiento del edificio, que fuera sede de la antigua Compañía Cervecera Toluca y México fundada en 1875 en el centro histórico de Toluca. Las adecuaciones serán para hacer un relato histórico tanto de la bebida como del propio edificio.
El inmueble data de finales del siglo XIX, cuando fue creada una de las compañías cerveceras más importantes durante el Porfiriato y productora de la cerveza Victoria, considerara una de las de mayor tradición en la historia del país, pues su origen también viene desde tiempos de los años 1800.
Incluso, es esta marca de cerveza la que será el eje de la museografía para narrar la historia de la bebida, pues Victoria fue producida originalmente por la Compañía Cervecera Toluca y México, luego adquirida por Grupo Modelo en 1935, y se comenzó a exportar a Estados Unidos en 2010.
“El inmueble donde se encuentra ubicado el MUMCI, será renovado para generar un nuevo espacio que albergará diversos proyectos en beneficio de la cultura, la salud, la educación y el deporte.
“Estas iniciativas contemplan la creación del nuevo museo de la cerveza Victoria®, que acondicionará y operará Grupo Modelo y que se localizará dentro del edificio considerado monumento histórico. Los proyectos que se desarrollen en el inmueble permitirán asegurar que la historia de este edificio perdure”, explica la compañía en un comunicado.
Durante los cinco años que permaneció el MUMCI, el edificio ofreció servicio de biblioteca, ludoteca infantil, un parque financiero, 21 salas de exposiciones con siete mil metros cuadrados, una sala con una pantalla IMAX, un restaurante y tienda de regalos. En sus exposiciones temporales y permanentes, el museo abordaba ramas industriales como la cervecera, vidrio, metalmecánica, cartón y papel, entre otras.
Hasta el momento, la empresa cervecera no ha detallado si mantendrá esta infraestructura, o cuál será el nuevo diseño. Marcela Cristo, directora de comunicación de Grupo Modelo, dijo que aún están trabajando en el diseño del proyecto museístico y de remodelación del edificio, el cual en 2007 fue restaurado, a cargo del arquitecto José de Arimatea Moyao, para servir como recinto cultural.
Una mirada al pasado
Hacer una revisión histórica de la cerveza significa hacer un repaso del pasado del país; incluso desde la llegada de los españoles fue cuando se introdujo por primera vez la bebida de cebada a la Nueva España, que poca aceptación tuvo porque ya existían sustancias alcohólicas como el mezcal o aguamiel.
La fabricación de cerveza en México tiene una larga tradición; sin embargo, fue recién a finales del siglo XIX que la industria cervecera “moderna” fincó raíces en nuestro país. Si bien existieron talleres artesanales que elaboraban dicha bebida con anterioridad, el establecimiento de la mayoría de las grandes fábricas con tecnología importada sólo se dio a lo largo de la década de 1890.
“A finales de la década de 1880 ya existían dos importantes cervecerías, una en el Distrito Federal y otra en Toluca. Sin embargo, la cerveza que se producía en aquellas empresas era básicamente para consumo de las localidades que colindaban con las fábricas”, detalla Gabriela Recio, investigadora de la Universidad de California, Estados Unidos.
En el ensayo El nacimiento de la industria cervecera en México, 1880-1910, la académica cuenta que la Compañía Cervecera Toluca y México fue una empresa familiar fundada por el alemán Santiago Graff que comenzó operaciones con 13 trabajadores y para 1885 producía diariamente entre tres y cinco hectolitros de cerveza para distribución local.
Fue en 1935, cuando el actual Grupo Modelo adquirió la antigua compañía cervecera.
En 1918 existían en México 36 productoras de cerveza, por la demanda que provocó la prohibición de venta de alcohol en Estados Unidos durante la década de 1920.
En 1925, a pesar de que la población prefería bebidas artesanales como pulque, había una gran inversión en la industria cervecera con una producción promedio de 50 mil litros al año.