A sus 46 años, la actriz veracruzana Salma Hayek tiene una adicción que mantiene viva la pasión con su marido, el multimillonario francés François-Henri Pinault… Es adicta al sexting, es decir, a mandar mensajes hot desde su teléfono móvil.
“Si pudiera mostrarte los mensajes, te sorprenderías. Puedo enseñarte miles de cosas, pero no lo voy a hacer”, aseguró con picardía la mexicana en una entrevista con la revista More haciendo referencia a una de las tácticas que utiliza para mantener encendida la llama de la pasión con su pareja.
Hace tiempo Hayek aseguró que “es más fácil conseguir un Oscar que un buen marido…”, y por ello está dispuesta a cuidarlo.
“Si hoy me ofrecieran cambiar mi vida actual por ser la actriz más famosa y mejor pagada, no lo aceptaría”, advirtió Salma, quien valora la familia que formó junto al empresario y a su hija Valentina.