La presidenta Claudia Sheinbaum presentó oficialmente la Comisión Presidencial para la Reforma Electoral, un órgano transitorio encabezado por Pablo Gómez, cuyo objetivo es convocar a una consulta nacional que incluya foros, debates, audiencias públicas y participación en línea para proponer cambios al sistema electoral mexicano.
Creada mediante decreto presidencial el 4 de agosto de 2025, la comisión depende directamente del Ejecutivo federal y cuenta con integrantes de la Secretaría de Gobernación, la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones, la Consejería Jurídica y la Oficina de la Presidencia. También podrá invitar a representantes de organismos autónomos, academia, partidos políticos, sociedad civil y comunidades indígenas, quienes tendrán voz pero no voto.
Entre los temas a discutir destacan el financiamiento y fiscalización de partidos y campañas, la posible implementación del voto electrónico, la representación proporcional en el Congreso, la regulación de la propaganda electoral, el régimen de partidos políticos, la competencia política y los mecanismos de participación ciudadana como la revocación de mandato.
Pablo Gómez destacó que la comisión seguirá principios de transparencia, objetividad y eficiencia, y que sus resultados preliminares (incluyendo encuestas y opiniones recabadas) se darán a conocer en octubre de 2025, mientras que las conclusiones finales se presentarán a la Presidencia en enero de 2026.
Claudia Sheinbaum aclaró que la comisión no contará con presupuesto adicional, ya que utilizará recursos y personal existentes en la Presidencia. Para los foros y consultas se solicitará apoyo logístico a gobiernos estatales y municipales.
La mandataria destacó que la participación estará abierta a todos, incluyendo legisladores, partidos políticos y consejeros del INE a título personal. Además, se habilitará un portal oficial para que cualquier persona pueda enviar sus propuestas, críticas y opiniones, las cuales serán publicadas para garantizar transparencia.
Sheinbaum enfatizó que el propósito de esta reforma electoral es fortalecer la democracia y evitar que regresen prácticas como el fraude electoral. “La historia de nuestro país habla de los fraudes; lo que no queremos es que nunca más en México regrese un fraude”, afirmó.