La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha comenzado un análisis exhaustivo sobre el uso del colorante Rojo No. 3 en México, tras la reciente revocación de su autorización por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA).
El objetivo de este proceso es asegurar la protección de los consumidores mexicanos, siguiendo normativas nacionales y estándares internacionales.
De acuerdo con la información proporcionada por el organismo, el análisis se realiza bajo las disposiciones del “Acuerdo por el que se determinan los aditivos y coadyuvantes en alimentos, bebidas y suplementos alimenticios”.
Este análisis determinará si el uso del Rojo No. 3 FD&C debe ser modificado, restringido o eliminado en México, respondiendo a las inquietudes sobre sus posibles efectos en la salud.
El artículo XIV del acuerdo regulatorio en México permite modificar las listas de aditivos, ya sea para incluir nuevos compuestos o eliminar aquellos que representen riesgos. Estas decisiones se fundamentan en evaluaciones científicas actualizadas y en las recomendaciones de expertos internacionales.
Aunque los estudios que vinculan el Rojo No. 3 con el cáncer sugieren que los niveles de exposición a este aditivo en humanos son mucho más bajos que los que provocan los efectos observados en ratas machos, las afirmaciones de que el uso de la eritrosina en alimentos y medicamentos ingeridos representa un riesgo para las personas no cuentan con el respaldo de la evidencia científica disponible.
Cabe recordar que, el color Rojo No. 3 es un tinte de alimentos sintético que le da a los alimentos y bebidas un color brillante tipo rojo cereza. Se utiliza principalmente en ciertos productos alimenticios, como dulces, pasteles, pastelitos, galletas, postres congelados, glaseados y helados, así como ciertas drogas ingeridas.
Por su parte, la dependencia reafirmó su compromiso con la protección de la salud de los mexicanos, mientras aseguró que continuará trabajando para prevenir cualquier riesgo asociado al consumo de aditivos. Según la institución, su labor se centra en garantizar que los productos que llegan al mercado sean seguros y cumplan con las normativas vigentes.