Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubón, advirtió que el incremento de los aranceles tendría un impacto negativo en las empresas de Estados Unidos en México, especialmente en el sector automotriz.
Señaló que la medida es darse “un tiro en el pie“, ya que se pueden perder hasta 400,000 empleos en la industria automotriz y autopartes. El funcionario añadió que el 88 por ciento de las pick-ups que se venden en Estados Unidos provienen de México.
“¿Esto de dónde sacamos la cifra? Pues en los Estados Unidos, 400 mil empleos en Estados Unidos se perderían esos empleos y esto lo consulté con las diferentes empresas…la estimación la hace la Secretaría de Economía con la consulta a la industria automotriz y de autopartes y todos los empleos generados en estos Estados Unidos”, dijó.
El secretario de Economía explicó que en 1930 y 1971, el Gobierno de Estados Unidos impuso aranceles a productos de origen mexicanos, pero si la medida se implementa esta vez habría una afectación mayor en la economía estadounidense.
Frente a esta situación, Ebrard Casaubón, propuso dos posibles escenarios: el de fragmentar y dividir la actividad económica regional mediante acusaciones y aranceles, lo que llevaría a una respuesta similar de México y Canadá ante las tarifas impuestas por Estados Unidos; o el de construir una región más competitiva de manera conjunta, que se convierta en líder a nivel mundial.
Indicó que México propondrá una mayor integración económica mediante el fortalecimiento de la colaboración regional en áreas como la seguridad y la migración.