El recién elegido dirigente nacional del PRD, Carlos Navarrete, reconoció que su partido no tuvo el suficiente control para evitar que el alcalde con licencia de Iguala, José Luis Abarca, cooptara policías que se dejaron infiltrar y que asumiera él la dirigencia del municipio.
“Cometimos un error y pedimos perdón a la sociedad de Guerrero, algo que otros partidos deben hacer también con los casos que les corresponde en otros estados”, externó en Iguala.
Manifestó que la violencia irrumpió nuevamente en Guerrero, en Iguala, y golpeó brutalmente a jóvenes estudiantes y deportistas, entre otros.
Para las indagatorias que lleven a la localización de los normalistas de Ayotzinapa y se aclaren los asesinatos en Iguala, Navarrete propuso la creación de una fiscalía ciudadana coadyuvante de las investigaciones, en la que participen organizaciones sociales y reconocidos líderes en la defensa de los derechos humanos.
Sobre la eventual renuncia del gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero, el dirigente perredista manifestó que no arreglaría nada, pues lo que se necesita es una verdadera contraofensiva contra el crimen organizado.
Por ello, Navarrete comentó que se debe acelerar la implementación de un mando único en Guerrero, pese que él en el pasado lo había rechazado, pero ante la situación que vive la entidad se dio cuenta de que es necesario.
Por su parte, el senador perredista Luis Miguel Barbosa afirmó que el gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero, debe ponerse al frente de la parte que le corresponde en las investigaciones de los hechos violentos en Iguala y que quede sujeto a una investigación de posibles responsabilidades políticas.
En este momento la Federación, el estado, los niveles de autoridad en Guerrero y en todo el país deben dar la cara, porque este asunto no es de Guerrero es nacional, se tiene que formar una opinión que satisfaga a la sociedad ante hechos tan lamentables.” En entrevista con Adela Micha para Grupo Imagen multimedia, el senador perredista destacó que en estos hechos lamentables, las autoridades llegaron tarde y ahora hay que ir directo al esclarecimiento de los hechos, y al asentamiento de responsabilidades de los autores intelectuales y materiales.
Navarrerte aseveró que el PRD adoptará las medidas necesarias para que nunca más vuelva a suceder lo que con el alcalde de Iguala: “Actuaremos para evaluar, dar seguimiento y corregir, si fuera necesario, a nuestros gobiernos municipales y evitar que sus policías municipales sean controladas por la delincuencia”.
El poder corruptor del crimen organizado es enorme. Sus recursos financieros y sus amenazas han doblegado a funcionarios públicos federales y en varios estados y municipios del país, dijo Navarrete.
El gobierno de la República se ha visto rebasado por la acción criminal. Por ello, ante lo ocurrido aquí, el PRD exigió la inmediata intervención federal, pues no puede, al igual que el gobierno del estado de Guerrero, eludir sus responsabilidades.”
Explicó que es necesaria la coordinación con los gobiernos del estado: “Esperamos una rápida investigación, la localización de los desaparecidos”.
Comentó que la impunidad alienta la criminalidad y por ello demandó la aplicación de la ley a quienes perpetraron el acto criminal contra los estudiantes normalistas, los jóvenes deportistas y otras personas en Iguala.
QUE CUMPLA
Instó al gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre a cumplir con sus obligaciones, al igual que lo debe hacer el Ejecutivo federal: “Todavía están pendientes de investigar otros hechos delictivos.
El Congreso del estado quitará el fuero constitucional al alcalde con licencia José Luis Abarca. De inmediato, debe proceder su detención e iniciar el castigo a los autores materiales e intelectuales de las desapariciones”.
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