Proceso/Foto: www.frontera.info
Integrantes de la mafia rusa que operaban en la zona este de Estados Unidos y que huyeron hacia este lado de la frontera mexicana, fueron detenidos en una casa de seguridad de Playas de Rosarito, Baja California.
Según un informe de la policía neoyorquina, las organizaciones criminales euroasiáticas realizan actividades de lavado de dinero, tráfico de armas y drogas en Europa, Asia y el Oriente Medio, y “ya se extendieron a la Unión Americana”.
Los extranjeros detenidos se dedicaban al tráfico de metanfetaminas y robo de vehículos, de acuerdo con una investigación de la policía federal de Nueva York, que los detectó en el complejo turístico Las Olas y Sol de este municipio limítrofe con Tijuana.
La primera información emitida sobre los rusos señala que pertenecían a una red internacional euroasiática dedicada al trasiego de drogas en Estados Unidos, pero al percatarse que se había girado una orden de aprehensión en su contra cruzaron la frontera para refugiarse en México.
Con los datos de los criminales llevamos a cabo un análisis de inteligencia sobre su posible ruta de escape hasta detectarlos en esta ciudad de la zona costa de la entidad, puntualizó el director de la Unidad de Enlace Internacional de la Policía Estatal Preventiva, Alfredo Arenas Moreno.
La oficina de los Marshall en Nueva York, dijo, lanzó una alerta a la policía mexicana, con las fichas y fotografías de Shogenov Tlostanbi y Azat Oganessian, de 27 y 41 años, respectivamente.
Los rusos arrestados, añadió, fueron puestos a disposición del Instituto Nacional de Migración en esta frontera para su traslado a la Ciudad de México y su posterior deportación.
