Charlie Clinton, un niño de 11 años, capturó hace unos días un pez con una característica bastante particular y, en un primer momento, aterradora: el animal, que se encontraba en un estanque, ¡tenía dientes de forma humana!
Después de notar esa característica del pez, Charlie comenzó a llamar desesperadamente a su mamá; “¡oh, Dios mío, mamá!, ¡oh, Dios mío!”, vociferaba el niño, de acuerdo con Janna Clinton, su madre.
Aunque acudió inmediatamente a ver qué le había ocurrido a su hijo, Janna Clinton confesó posteriormente a la Radio Pública Nacional de Estados Unidos (NPR, por sus siglas en inglés), que pensó que Charlie “estaba siendo dramático, para ser honesta”.
“Al estar en un estanque del vecindario, estamos acostumbrados a atrapar solo algunas lubinas o bagres (…) Quiero decir, nada con dientes humanos”, agregó Janna Clinton.
El pez capturado por Charlie era un pacú, primo de la piraña y originario de América del Sur, el cual siempre ha provocado terror o, al menos, desconcierto entre las personas que lo encuentran y ven sus dientes “humanos”.
Especie invasiva
Después de publicar una foto del extraño pez en la página de Facebook del vecindario en el que viven, los Clinton se comunicaron con los guardaparques y, luego, regresaron al pacú al estanque donde fue capturado.
Tras postear la foto en Facebook, varias personas identificaron al pez y advirtieron que era una especie invasiva y que no deberían haberlo liberado. “Cometimos un error allí”, aceptó Janna Clinton.
“Es un estanque de captura y liberación (…) así que, desafortunadamente, lo liberamos porque no sabíamos nada mejor en ese momento”, se excusó la madre de Charlie.
El Departamento de Conservación de Vida Silvestre de Oklahoma cree que el pacú era una mascota que creció más que su tanque y fue liberada por su propietario en la naturaleza.
Incluso, envió un mensaje en Twitter a quien hubiera sido dueño del pez, cuestionando la liberación del pacú: “Estimado quien seas (…) ¿cómo te atreves?”, breve mensaje que inició un vivaz intercambio de opiniones entre tuiteros.
Dear, whoever released an entire Pacu (a South American fish closely related to Piranha) into a NEIGHBORHOOD pond;
how dare you. pic.twitter.com/WwQqJ9REAz
— Oklahoma Department of Wildlife Conservation (@OKWildlifeDept) July 18, 2023
Por su parte, el pequeño Charlie Clinton regresó al estanque para ver si podía pescar nuevamente al pacú y se quedó hasta la noche tratando de capturarlo, sin éxito. En los días posteriores se ha levantado temprano con la esperanza de capturar nuevamente a su rara presa.
Si lo consigue, uno de sus vecinos se ha ofrecido a comerse al raro pez, pero Janna Clinton dice que si Charlie lo vuelve a atrapar, mandarán a disecarlo para que lo conserve como trofeo, eso sí, como si el pacú estuviera sonriendo, para que se aprecie su dentadura “humana”.
Con información de NPR