Zohran Mamdani, un socialista demócrata de 34 años, se convirtió en el nuevo alcalde de la ciudad de Nueva York, tras imponerse con contundencia al exgobernador Andrew Cuomo y al republicano Curtis Sliwa en una elección marcada por la participación más alta en más de medio siglo. Con su triunfo, Mamdani se convierte en el primer alcalde musulmán y el más joven en más de 100 años en dirigir la ciudad más poblada de Estados Unidos.
Con el 91% de los votos escrutados, el candidato progresista obtuvo el 50.4% de los sufragios, frente al 41.6% de Cuomo y el 7.1% de Sliwa. La jornada electoral reunió a más de dos millones de votantes, cifra inédita desde 1969.
“Amigos, hemos derrocado una dinastía política”, proclamó Mamdani en su discurso de victoria en Brooklyn, en alusión al apellido Cuomo, una de las familias más influyentes en la política neoyorquina. “Nueva York seguirá siendo una ciudad de inmigrantes, construida por inmigrantes, impulsada por inmigrantes y, a partir de esta noche, liderada por un inmigrante”.
Nacido en Kampala, Uganda, e hijo de la cineasta Mira Nair y del académico Mahmood Mamdani, el nuevo alcalde creció en Queens y se naturalizó estadounidense en 2018. Su historia personal –que mezcla raíces africanas, indias y musulmanas– ha sido parte central de su discurso político.
Una plataforma progresista y una visión de cambio
Durante la campaña, Mamdani centró su mensaje en la justicia social y la crisis del costo de vida, prometiendo guarderías gratuitas, transporte público sin costo, supermercados públicos, congelación de rentas y la creación de 200 mil viviendas asequibles. También propuso un Departamento de Seguridad Comunitaria que priorice equipos de salud mental sobre la fuerza policial tradicional.
“Esta es una ciudad donde una de cada cuatro personas vive en la pobreza”, dijo en una entrevista previa a la BBC. “Y en última instancia, es una ciudad que está en peligro de perder aquello que la hace tan especial”.
El nuevo alcalde prometió financiar sus programas con impuestos más altos a las grandes corporaciones y a las personas de mayores ingresos, una propuesta que ha dividido incluso a su propio partido. Parte del liderazgo demócrata, incluido el senador Chuck Schumer, se mostró reticente a respaldarlo, considerándolo “demasiado radical”.
Tensión con Trump y el ala conservadora
La elección también estuvo marcada por los ataques del presidente Donald Trump, quien advirtió que reduciría la financiación federal a Nueva York si Mamdani ganaba. En su red social Truth Social, el mandatario calificó al demócrata de “comunista” y “antisemita declarado”.
Durante su discurso, Mamdani respondió con ironía: “Donald Trump, sé que me está viendo. Solo tengo cuatro palabras para usted: ¡suba el volumen! (turn the volum up, ndlr)”. Añadió que su administración será “un nuevo rumbo valiente” frente a la “oligarquía y el autoritarismo”.
“Si alguien puede mostrarle a una nación traicionada por Donald Trump cómo derrotarlo, es la ciudad que lo vio nacer”, enfatizó el alcalde electo ante sus seguidores.
Un nuevo rostro para la izquierda neoyorquina
Su victoria representa un triunfo para el ala progresista del Partido Demócrata y una señal del giro político de una ciudad históricamente liberal, pero que ahora apuesta por una visión más abiertamente socialista.
Mamdani asumirá el cargo el 1 de enero, sucediendo a Eric Adams, quien desistió de buscar la reelección. Su mandato comenzará bajo la mirada atenta de Washington y de un sector empresarial que observa con cautela su agenda redistributiva.
“Esta victoria es de ustedes. La democracia también. En este momento de oscuridad política, Nueva York será la luz”, afirmó Mamdani, cerrando un discurso que marcó el inicio de una nueva era política para la ciudad.




