El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) publicó la lista de 11 personas detenidas durante las recientes redadas migratorias en Los Ángeles, California. Entre los arrestados se encuentran seis ciudadanos mexicanos, señalados por el gobierno de Donald Trump como presuntos responsables de delitos graves, aunque sin presentar pruebas judiciales públicas.
Los detenidos —hombres entre 26 y 55 años— provienen de México, Vietnam, Filipinas, Ecuador, Perú y Honduras. El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) los acusa de haber cometido delitos como asesinato, violencia doméstica, narcotráfico, agresión sexual y otros delitos violentos, aunque activistas y abogados denuncian falta de transparencia y errores administrativos.
Los mexicanos identificados incluyen a Lionel Sánchez-Laguna, con condenas por asalto armado y violencia doméstica; Armando Ordaz, con antecedentes por agresión sexual y hurto; y Jesús Alan Hernández-Morales, implicado en tráfico de personas. También figuran Francisco Sánchez-Argüello, Víctor Mendoza-Aguilar y Delfino Aguilar-Martínez, todos con historial delictivo en California.
Según el asesor migratorio Tom Homan, unas 150 personas han sido arrestadas en estas macroredadas, mientras que más de 2 mil elementos de la Guardia Nacional han sido desplegados en Los Ángeles para contener las protestas surgidas tras los operativos.
Estas acciones forman parte del plan de deportaciones masivas impulsado por Trump tras su regreso a la Casa Blanca, pese a señalamientos de abusos, detenciones erróneas y violaciones a derechos humanos, como en los casos de Kilmar Ábrego y Ximena Arias, migrantes afectados por errores del sistema migratorio estadounidense.